Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





Lucas 15:13 - Biblia Reina Valera 1909

13 Y no muchos días después, juntándolo todo el hijo menor, partió lejos á una provincia apartada; y allí desperdició su hacienda viviendo perdidamente.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

13 No muchos días después, juntándolo todo el hijo menor, se fue lejos a una provincia apartada; y allí desperdició sus bienes viviendo perdidamente.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

13 »Pocos días después, el hijo menor empacó sus pertenencias y se mudó a una tierra distante, donde derrochó todo su dinero en una vida desenfrenada.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

13 El hijo menor juntó todos sus haberes, y unos días después se fue a un país lejano. Allí malgastó su dinero llevando una vida desordenada.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

13 Después de no muchos días, el hijo menor, recogiendo todo, partió hacia un país lejano, y allí malgastó su hacienda viviendo perdidamente.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

13 No muchos días después, el hijo más joven lo reunió todo, se fue a un país lejano y allí despilfarró su hacienda, llevando una vida licenciosa.

Féach an chaibidil Cóip




Lucas 15:13
35 Tagairtí Cros  

Porque he aquí, los que se alejan de ti perecerán: Tú cortarás á todo aquel que fornicando, de ti se aparta.


También el que es negligente en su obra Es hermano del hombre disipador.


Hombre necesitado será el que ama el deleite: Y el que ama el vino y ungüentos no enriquecerá.


Tesoro codiciable y pingüe hay en la casa del sabio; Mas el hombre insensato lo disipará.


Cual ave que se va de su nido, Tal es el hombre que se va de su lugar.


El que guarda la ley es hijo prudente: Mas el que es compañero de glotones, avergüenza á su padre.


El hombre que ama la sabiduría, alegra á su padre: Mas el que mantiene rameras, perderá la hacienda.


Porque a causa de la mujer ramera es reducido el hombre á un bocado de pan; Y la mujer caza la preciosa alma del varón.


¡Oh gente pecadora, pueblo cargado de maldad, generación de malignos, hijos depravados! Dejaron á Jehová, provocaron á ira al Santo de Israel, tornáronse atrás.


Y he aquí gozo y alegría, matando vacas y degollando ovejas, comer carne y beber vino, diciendo: Comamos y bebamos, que mañana moriremos.


Dejad el camino, apartaos de la senda, haced cesar de nuestra presencia al Santo de Israel.


Venid, dicen, tomaré vino, embriaguémonos de sidra; y será el día de mañana como este, ó mucho más excelente.


Porque dos males ha hecho mi pueblo: dejáronme á mí, fuente de agua viva, por cavar para sí cisternas, cisternas rotas que no detienen aguas.


¡Oh generación! ved vosotros la palabra de Jehová. ¿He sido yo á Israel soledad, ó tierra de tinieblas? ¿Por qué ha dicho mi pueblo: Señores somos; nunca más vendremos á ti?


Así dijo Jehová: ¿Qué maldad hallaron en mí vuestros padres, que se alejaron de mí, y se fueron tras la vanidad, y tornáronse vanos?


Pueblo mío, ¿qué te he hecho, ó en qué te he molestado? Responde contra mí.


Y el menor de ellos dijo á su padre: Padre, dame la parte de la hacienda que me pertenece: y les repartió la hacienda.


Y cuando todo lo hubo malgastado, vino una grande hambre en aquella provincia, y comenzóle á faltar.


Mas cuando vino éste tu hijo, que ha consumido tu hacienda con rameras, has matado para él el becerro grueso.


Y DIJO también á sus discípulos: Había un hombre rico, el cual tenía un mayordomo, y éste fué acusado delante de él como disipador de sus bienes.


Había un hombre rico, que se vestía de púrpura y de lino fino, y hacía cada día banquete con esplendidez.


Mas ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo estabais lejos, habéis sido hechos cercanos por la sangre de Cristo.


Y vino, y anunció la paz á vosotros que estabais lejos, y á los que estaban cerca:


Recibiendo el galardón de su injusticia, ya que reputan por delicia poder gozar de deleites cada día. Estos son suciedades y manchas, los cuales comiendo con vosotros, juntamente se recrean en sus errores;


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí