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Gálatas 6:12 - Biblia Reina Valera 1909

12 Todos los que quieren agradar en la carne, éstos os constriñen á que os circuncidéis, solamente por no padecer persecución por la cruz de Cristo.

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Biblia Reina Valera 1960

12 Todos los que quieren agradar en la carne, estos os obligan a que os circuncidéis, solamente para no padecer persecución a causa de la cruz de Cristo.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

12 Los que tratan de obligarlos a circuncidarse lo hacen para quedar bien con otros. No quieren ser perseguidos por enseñar que solo la cruz de Cristo salva.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

12 Los que tratan de imponerles la circuncisión son sobre todo gente preocupada por ser más considerados en el mundo; no quieren que la cruz de Cristo les acarree problemas.

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La Biblia Textual 3a Edicion

12 Todos los que desean tener buena apariencia en la carne, ésos os obligan a circuncidaros, sólo para no ser perseguidos por causa de la cruz del Mesías.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

12 Todos los que quieren aparecer bien en lo humano, ésos os obligan a circuncidaros, sólo para no ser perseguidos a causa de la cruz de Cristo.

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Gálatas 6:12
22 Tagairtí Cros  

¡Ay de vosotros, escribas y Fariseos, hipócritas! porque sois semejantes á sepulcros blanqueados, que de fuera, á la verdad, se muestran hermosos, mas de dentro están llenos de huesos de muertos y de toda suciedad.


Así también vosotros de fuera, á la verdad, os mostráis justos á los hombres; mas de dentro, llenos estáis de hipocresía é iniquidad.


Antes, todas sus obras hacen para ser mirados de los hombres; porque ensanchan sus filacterias, y extienden los flecos de sus mantos;


Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia: porque de ellos es el reino de los cielos.


Y cuando ayunáis, no seáis como los hipócritas, austeros; porque ellos demudan sus rostros para parecer á los hombres que ayunan: de cierto os digo, que ya tienen su pago.


Cuando pues haces limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las plazas, para ser estimados de los hombres: de cierto os digo, que ya tienen su recompensa.


Y cuando oras, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en las sinagogas, y en los cantones de las calles en pie, para ser vistos de los hombres: de cierto os digo, que ya tienen su pago.


Y díjoles: Vosotros sois los que os justificáis á vosotros mismos delante de los hombres; mas Dios conoce vuestros corazones; porque lo que los hombres tienen por sublime, delante de Dios es abominación.


Que devoran las casas de las viudas, poniendo por pretexto la larga oración: éstos recibirán mayor condenación.


El que habla de sí mismo, su propia gloria busca; mas el que busca la gloria del que le envió, éste es verdadero, y no hay en él injusticia.


ENTONCES algunos que venían de Judea enseñaban á los hermanos: Que si no os circuncidáis conforme al rito de Moisés, no podéis ser salvos.


Mas algunos de la secta de los Fariseos, que habían creído, se levantaron, diciendo: Que es menester circuncidarlos, y mandarles que guarden la ley de Moisés.


Porque no osamos entremeternos ó compararnos con algunos que se alaban á sí mismos: mas ellos, midiéndose á sí mismos por sí mismos, y comparándose consigo mismos no son juiciosos.


Porque éstos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, trasfigurándose en apóstoles de Cristo.


Mas cuando vi que no andaban derechamente conforme á la verdad del evangelio, dije á Pedro delante de todos: Si tú, siendo Judío, vives como los Gentiles y no como Judío, ¿por qué constriñes á los Gentiles á judaizar?


Mas ni aun Tito, que estaba conmigo, siendo Griego, fué compelido á circuncidarse.


Y yo, hermanos, si aun predico la circuncisión, ¿por qué padezco persecución todavía? pues que quitado es el escándalo de la cruz.


Porque ni aun los mismos que se circuncidan guardan la ley; sino que quieren que vosotros seáis circuncidados, para gloriarse en vuestra carne.


Y algunos, á la verdad, predican á Cristo por envidia y porfía; mas algunos también por buena voluntad.


No mirando cada uno á lo suyo propio, sino cada cual también á lo de los otros.


Porque muchos andan, de los cuales os dije muchas veces, y aun ahora lo digo llorando, que son enemigos de la cruz de Cristo:


Tales cosas tienen á la verdad cierta reputación de sabiduría en culto voluntario, y humildad, y en duro trato del cuerpo; no en alguna honra para el saciar de la carne.


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