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Efesios 4:25 - Biblia Reina Valera 1909

25 Por lo cual, dejada la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros.

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Biblia Reina Valera 1960

25 Por lo cual, desechando la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

25 Así que dejen de decir mentiras. Digamos siempre la verdad a todos porque nosotros somos miembros de un mismo cuerpo.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

25 Por eso, no más mentiras; que todos digan la verdad a su prójimo, ya que todos somos parte del mismo cuerpo.

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La Biblia Textual 3a Edicion

25 Por tanto, desechando la mentira, cada uno hable verdad con su prójimo,° porque somos miembros los unos de los otros.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

25 Por lo cual, desechando la mentira, que cada uno hable a su prójimo con verdad, porque somos miembros los unos de los otros.

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Efesios 4:25
42 Tagairtí Cros  

Y el otro le dijo: Yo también soy profeta como tú, y un ángel me ha hablado por palabra de Jehová, diciendo: Vuélvele contigo á tu casa, para que coma pan y beba agua. Empero mintióle.


Aparta de mí camino de mentira; Y hazme la gracia de tu ley.


El que anda en integridad, y obra justicia, Y habla verdad en su corazón.


Amaste el mal más que el bien; La mentira más que hablar justicia. (Selah.)


De palabra de mentira te alejarás, y no matarás al inocente y justo; porque yo no justificaré al impío.


El que habla verdad, declara justicia; Mas el testigo mentiroso, engaño.


El labio de verdad permanecerá para siempre: Mas la lengua de mentira por un momento.


Los labios mentirosos son abominación á Jehová: Mas los obradores de verdad su contentamiento.


Allegar tesoros con lengua de mentira, Es vanidad desatentada de aquellos que buscan la muerte.


No seas sin causa testigo contra tu prójimo; Y no lisonjees con tus labios.


Los ojos altivos, la lengua mentirosa, Las manos derramadoras de sangre inocente,


Porque mi boca hablará verdad, Y la impiedad abominan mis labios.


Porque dijo: Ciertamente mi pueblo son, hijos que no mienten; y fué su Salvador.


El viejo y venerable de rostro es la cabeza: el profeta que enseña mentira, este es cola.


Perjurar, y mentir, y matar, y hurtar y adulterar prevalecieron, y sangres se tocaron con sangres.


No hurtaréis, y no engañaréis, ni mentiréis ninguno á su prójimo.


Estas son las cosas que habéis de hacer: Hablad verdad cada cual con su prójimo; juzgad en vuestras puertas verdad y juicio de paz:


Así ha dicho Jehová de los ejércitos: El ayuno del cuarto mes, y el ayuno del quinto, y el ayuno del séptimo, y el ayuno del décimo, se tornarán á la casa de Judá en gozo y alegría, y en festivas solemnidades. Amad pues verdad y paz.


Vosotros de vuestro padre el diablo sois, y los deseos de vuestro padre queréis cumplir. Él, homicida ha sido desde el principio, y no permaneció en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira.


Así muchos somos un cuerpo en Cristo, mas todos miembros los unos de los otros.


Porque un pan, es que muchos somos un cuerpo; pues todos participamos de aquel un pan.


Pues si algo me he gloriado para con él de vosotros, no he sido avergonzado; antes, como todo lo que habíamos dicho de vosotros era con verdad, así también nuestra gloria delante de Tito fué hallada verdadera.


Antes siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todas cosas en aquel que es la cabeza, á saber, Cristo;


A que dejéis, cuanto á la pasada manera de vivir; el viejo hombre que está viciado conforme á los deseos de error;


Toda amargura, y enojó, é ira, y voces, y maledicencia sea quitada de vosotros, y toda malicia:


Porque somos miembros de su cuerpo, de su carne y de sus huesos.


Mas ahora, dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, maledicencia, torpes palabras de vuestra boca.


No mintáis los unos á los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos,


Para los fornicarios, para los sodomitas, para los ladrones de hombres, para los mentirosos y perjuros, y si hay alguna otra cosa contraria a la sana doctrina;


Que con hipocresía hablarán mentira, teniendo cauterizada la conciencia.


Dijo uno de ellos, propio profeta de ellos: Los Cretenses, siempre mentirosos, malas bestias, vientres perezosos.


Para la esperanza de la vida eterna, la cual Dios, que no puede mentir, prometió antes de los tiempos de los siglos,


POR tanto nosotros también, teniendo en derredor nuestro una tan grande nube de testigos, dejando todo el peso del pecado que nos rodea, corramos con paciencia la carrera que nos es propuesta,


Por lo cual, dejando toda inmundicia y superfluidad de malicia, recibid con mansedumbre la palabra ingerida, la cual puede hacer salvas vuestras almas.


DEJANDO pues toda malicia, y todo engaño, y fingimientos, y envidias, y todas las detracciones,


Mas á los temerosos é incrédulos, á los abominables y homicidas, á los fornicarios y hechiceros, y á los idólatras, y á todos los mentirosos, su parte será en el lago ardiendo con fuego y azufre, que es la muerte segunda.


Mas los perros estarán fuera, y los hechiceros, y los disolutos, y los homicidas, y los idólatras, y cualquiera que ama y hace mentira.


Y él le dijo: Si me ataren fuertemente con cuerdas nuevas, con las cuales ninguna cosa se haya hecho, yo me debilitaré, y seré como cualquiera de los hombres.


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