Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





2 Samuel 12:4 - Biblia Reina Valera 1909

4 Y vino uno de camino al hombre rico; y él no quiso tomar de sus ovejas y de sus vacas, para guisar al caminante que le había venido, sino que tomó la oveja de aquel hombre pobre, y aderezóla para aquél que le había venido.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

4 Y vino uno de camino al hombre rico; y este no quiso tomar de sus ovejas y de sus vacas, para guisar para el caminante que había venido a él, sino que tomó la oveja de aquel hombre pobre, y la preparó para aquel que había venido a él.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

4 Cierto día llegó una visita a la casa del hombre rico. Pero en lugar de matar un animal de su propio rebaño o de su propia manada, tomó la ovejita del hombre pobre, la mató y la preparó para su invitado.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

4 Un día el rico recibió a una visita. Como no quería sacrificar ningún animal de su ganado para preparar una cena al que acababa de llegar, robó la oveja del pobre y se la preparó a su visita'.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

4 Pero un viajero fue al hombre rico, y éste no quiso tomar de sus rebaños ni de sus vacadas para guisarlas para el viajero que le había llegado, sino que tomó la corderita de aquel hombre pobre y la guisó para el hombre que había venido a él.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 Llegó un viajero a casa del rico, quien, doliéndole tener que tomar de sus ovejas y bueyes para dar de comer al viajero llegado a su casa, echó mano a la ovejita del pobre y la aderezó para el hombre que había llegado a su casa'.

Féach an chaibidil Cóip




2 Samuel 12:4
6 Tagairtí Cros  

Mas el pobre no tenía más que una sola cordera, que él había comprado y criado, y que había crecido con él y con sus hijos juntamente, comiendo de su bocado, y bebiendo de su vaso, y durmiendo en su seno: y teníala como á una hija.


Entonces se encendió el furor de David en gran manera contra aquel hombre, y dijo á Nathán: Vive Jehová, que el que tal hizo es digno de muerte.


Sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído, y cebado.


Y alzando el viejo los ojos, vió á aquel viajante en la plaza de la ciudad, y díjole: ¿A dónde vas, y de dónde vienes?


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí