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2 Reyes 8:7 - Biblia Reina Valera 1909

7 Eliseo se fué luego á Damasco, y Ben-adad rey de Siria estaba enfermo, al cual dieron aviso, diciendo: El varón de Dios ha venido aquí.

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Biblia Reina Valera 1960

7 Eliseo se fue luego a Damasco; y Ben-adad rey de Siria estaba enfermo, al cual dieron aviso, diciendo: El varón de Dios ha venido aquí.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

7 Luego Eliseo fue a Damasco, la capital de Aram, donde el rey Ben-adad estaba enfermo. Cuando alguien le informó al rey que el hombre de Dios había llegado,

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Biblia Católica (Latinoamericana)

7 Eliseo se fue a Damasco. El rey de Aram, Ben-Hadad, estaba enfermo y le comunicaron la noticia de que el hombre de Dios había llegado.

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La Biblia Textual 3a Edicion

7 Y Eliseo fue a Damasco, y Ben-adad, rey de Siria, estaba enfermo, y le dijeron: El varón de Dios ha venido aquí.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

7 Eliseo fue luego a Damasco. Ben Hadad, rey de Aram, estaba enfermo, y le dieron esta noticia: 'El varón de Dios ha llegado aquí'.

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2 Reyes 8:7
18 Tagairtí Cros  

Y derramóse sobre ellos de noche él y sus siervos, é hiriólos, y fuélos siguiendo hasta Hobah, que está á la izquierda de Damasco.


Y había juntado gente contra él, y habíase hecho capitán de una compañía, cuando David deshizo á los de Soba. Después se fueron á Damasco, y habitaron allí é hiciéronle rey en Damasco.


Y HE aquí que un varón de Dios por palabra de Jehová vino de Judá á Beth-el; y estando Jeroboam al altar para quemar perfumes,


Entonces tomando Asa toda la plata y oro que había quedado en los tesoros de la casa de Jehová, y los tesoros de la casa real, entrególos en las manos de sus siervos, y enviólos el rey Asa á Ben-adad, hijo de Tabrimón, hijo de Hezión, rey de Siria, el cual residía en Damasco, diciendo:


ENTONCES Ben-adad rey de Siria juntó á todo su ejército, y con él treinta y dos reyes, con caballos y carros: y subió, y puso cerco á Samaria, y combatióla.


Y díjole Ben-adad: Las ciudades que mi padre tomó al tuyo, yo las restituiré; y haz plazas en Damasco para ti, como mi padre las hizo en Samaria. Y yo, dijo Achâb, te dejaré partir con esta alianza. Hizo pues con él alianza, y dejóle ir.


Y Ochôzías cayó por las celosías de una sala de la casa que tenía en Samaria; y estando enfermo envió mensajeros, y díjoles: Id, y consultad á Baal-zebub dios de Ecrón, si tengo de sanar de esta mi enfermedad.


Y viéndole los hijos de los profetas que estaban en Jericó de la otra parte, dijeron: El espíritu de Elías reposó sobre Eliseo. Y viniéronle á recibir, é inclináronse á él hasta la tierra.


Entonces Giezi, criado de Eliseo el varón de Dios, dijo entre sí: He aquí mi señor estorbó á este Siro Naamán, no tomando de su mano las cosas que había traído. Vive Jehová, que correré yo tras él, y tomaré de él alguna cosa.


Entonces uno de los siervos dijo: No, rey, señor mío; sino que el profeta Eliseo está en Israel, el cual declara al rey de Israel las palabras que tú hablas en tu más secreta cámara.


Después de esto aconteció, que Ben-adad rey de Siria juntó todo su ejército, y subió, y puso cerco á Samaria.


Y preguntando el rey á la mujer, ella se lo contó. Entonces el rey le dió un eunuco, diciéndole: Hazle volver todas las cosas que eran suyas, y todos los frutos de la tierras desde el día que dejó el país hasta ahora.


Porque la cabeza de Siria es Damasco, y la cabeza de Damasco, Rezín: y dentro de sesenta y cinco años Ephraim será quebrantado hasta dejar de ser pueblo.


Y aun no se había él vuelto, cuando le dijo: Vuélvete á Gedalías hijo de Ahicam, hijo de Saphán, al cual el rey de Babilonia ha puesto sobre todas las ciudades de Judá, y vive con él en medio del pueblo: ó ve á donde te pareciere más cómodo de ir. Y dióle el capitán de la guardia presentes y dones, y despidióle.


Mas no hallándolos, trajeron á Jasón y á algunos hermanos á los gobernadores de la ciudad, dando voces: Estos que alborotan el mundo, también han venido acá;


Y ESTA es la bendición con la cual bendijo Moisés varón de Dios á los hijos de Israel, antes que muriese.


Y fué dicho á los de Gaza: Samsón es venido acá. Y cercáronlo, y pusiéronle espías toda aquella noche á la puerta de la ciudad: y estuvieron callados toda aquella noche, diciendo: Hasta la luz de la mañana; entonces lo mataremos.


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