Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





2 Reyes 24:4 - Biblia Reina Valera 1909

4 Asimismo por la sangre inocente que derramó, pues hinchió á Jerusalem de sangre inocente: Jehová por tanto, no quiso perdonar.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

4 asimismo por la sangre inocente que derramó, pues llenó a Jerusalén de sangre inocente; Jehová, por tanto, no quiso perdonar.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

4 quien había llenado Jerusalén con sangre inocente. El Señor no perdonaba eso.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

4 pero también a causa de la sangre inocente derramada de tal forma en Jerusalén que ésta se había repletado de ella. Yavé ya no quería perdonar.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

4 y también por la sangre inocente que había derramado, pues había llenado a Jerusalem de sangre inocente, y YHVH no quiso perdonar.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 también por la sangre inocente que había derramado, hasta llenar de ella a Jerusalén. Por eso Yahveh no quiso perdonar.

Féach an chaibidil Cóip




2 Reyes 24:4
20 Tagairtí Cros  

Por cuanto Manasés rey de Judá ha hecho estas abominaciones, y ha hecho más mal que todo lo que hicieron los Amorrheos que fueron antes de él, y también ha hecho pecar á Judá en sus ídolos;


Fuera de esto, derramó Manasés mucha sangre inocente en gran manera, hasta henchir á Jerusalem de cabo á cabo: además de su pecado con que hizo pecar á Judá, para que hiciese lo malo en ojos de Jehová.


Con todo eso, no se volvió Jehová del ardor de su grande ira, con que se había encendido su enojo contra Judá, por todas las provocaciones con que Manasés le había irritado.


Lo demás de los hechos de Joacim, y todas las cosas que hizo, ¿no está escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Judá?


Y derramaron la sangre inocente, la sangre de sus hijos y de sus hijas, Que sacrificaron á los ídolos de Canaán: Y la tierra fué contaminada con sangre.


Los ojos altivos, la lengua mentirosa, Las manos derramadoras de sangre inocente,


Y entregarélos á ser agitados por todos los reinos de la tierra, á causa de Manasés hijo de Ezechîas rey de Judá, por lo que hizo en Jerusalem.


Porque me dejaron, y enajenaron este lugar, y ofrecieron en él perfumes á dioses ajenos, los cuales no habían ellos conocido, ni sus padres, ni los reyes de Judá; y llenaron este lugar de sangre de inocentes;


Aun en tus faldas se halló la sangre de las almas de los pobres, de los inocentes: no la hallé en excavación, sino en todas estas cosas.


Mas tus ojos y tu corazón no son sino á tu avaricia, y á derramar la sangre inocente, y á opresión, y á hacer agravio.


Por manera que para enojo mío y para ira mía me ha sido esta ciudad, desde el día que la edificaron hasta hoy, para que la haga quitar de mi presencia;


Nosotros nos hemos rebelado, y fuimos desleales; tú no perdonaste.


Dirás, pues: Así ha dicho el Señor Jehová: ¡Ciudad derramadora de sangre en medio de sí, para que venga su hora, y que hizo ídolos contra sí misma para contaminarse!


Pues así ha dicho el Señor Jehová: ¡Ay de la ciudad de sangres, de la olla no espumada, y cuya espuma no salió de ella! Por sus piezas, por sus piezas sácala; no caiga sobre ella suerte.


Habiendo, pues, hecho subir la ira para hacer venganza, yo pondré su sangre sobre la dura piedra, para que no sea cubierta.


Por tanto, diles: Así dicho el Señor Jehová: ¿Con sangre comeréis, y á vuestros ídolos alzaréis vuestros ojos, y sangre derramaréis, y poseeréis vosotros la tierra?


Y no contaminaréis la tierra donde estuviereis: porque esta sangre amancillará la tierra: y la tierra no será expiada de la sangre que fué derramada en ella, sino por la sangre del que la derramó.


Porque no sea derramada sangre inocente en medio de tu tierra, que Jehová tu Dios te da por heredad, y sea sobre ti sangre.


Y sea que, cuando el tal oyere las palabras de esta maldición, él se bendiga en su corazón, diciendo: Tendré paz, aunque ande según el pensamiento de mi corazón, para añadir la embriaguez á la sed:


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí