2 Crónicas 25 - Biblia Lenguaje BásicoAmasías, rey de Judá (2 Re 14.1-20) 1 Amasías tenía veinticinco años cuando comenzó a reinar. La capital de su reino fue Jerusalén, y su reinado duró veintinueve años. Su madre era de Jerusalén y se llamaba Joadán. 2 Amasías se comportó bien ante Dios, aunque no lo hizo con plena lealtad. 3 Cuando Amasías llegó a tener el control del país, mató a todos los que habían asesinado a su padre. 4 Sin embargo no mató a los hijos de los asesinos, pues la ley que Dios entregó a Moisés dice: «Los padres no deben morir por culpa de sus hijos, ni los hijos deben morir por culpa de sus padres. Cada persona debe morir por su propio pecado». Amasías derrota a Edom 5 Amasías decidió atacar a Edom. Para ello convocó a todos los hombres mayores de veinte años que pertenecían a las tribus de Judá y de Benjamín. Los organizó de acuerdo a sus familias, y los puso bajo las órdenes de los jefes del ejército. Reunió un total de trescientos mil de los mejores soldados, expertos en el uso de lanzas y escudos. 6-7 Además, contrató, por tres mil trescientos kilos de plata, a cien mil valientes soldados del reino de Israel, que pertenecían a la tribu de Efraín. Sin embargo, un profeta se presentó ante el rey y le dijo: —No utilices, oh rey, a esos soldados israelitas de la tribu de Efraín, porque Dios no está con ellos. 8 Si insistes en utilizarlos, Dios hará que tus enemigos te derroten, pues solo él concede la victoria o castiga con la derrota. 9 Pero Amasías le respondió: —Pero si les pido que se vayan, no recuperaré los tres mil trescientos kilos de plata que les di. El profeta le aseguró: —Dios te dará mucho más que eso. 10-13 Entonces Amasías ordenó a los soldados de la tribu de Efraín que regresaran a sus casas. Ellos se lo tomaron muy mal y, en el camino de regreso a su tierra, invadieron las ciudades de Judá, desde Samaría hasta Bet Jorón, mataron como a tres mil personas y se llevaron todas sus pertenencias. Mientras tanto, Amasías se llenó de valor y, acompañado de su ejército, fue al Valle de la Sal y mató a diez mil hombres de Edom. A otros diez mil se los llevaron presos a la cima de una roca alta, y desde allí los despeñaron. Todos murieron estrellados contra el suelo. 14 Después de derrotar a los de Edom, Amasías regresó a Jerusalén, llevando consigo varias imágenes de dioses falsos a los que comenzó a dar culto y a quemar incienso en su honor. 15 Esto provocó la ira de Dios contra Amasías, quien envió un profeta con este mensaje para él: —¿Cómo es posible que ahora adores a dioses que no pudieron salvar a su pueblo de tu poder? 16 Amasías interrumpió al profeta y le dijo: —¡No necesito tus consejos! ¡Cállate si no quieres morir! Entonces el profeta le dijo: —Ya veo que no quieres escucharme. No hay duda de que Dios te ha abandonado y de que va a destruirte. 17 Después de consultar a sus consejeros, Amasías, rey de Judá, envió mensajeros a Joás, rey de Israel, con el fin de declararle la guerra. 18 Joás contestó a Amasías: —Una vez un insignificante cardo del Líbano mandó a decir a un gigantesco cedro del Líbano: «Dale tu hija a mi hijo, como esposa». Pero una fiera del Líbano pasó y aplastó al cardo. 19 No hay duda de que has vencido a Edom y eso hace que te sientas orgulloso. Pues alégrate de tu triunfo y quédate tranquilo en tu casa. No provoques un desastre, ni para ti ni para Judá. 20 Pero Amasías no hizo caso a Joás, pues Dios había decidido entregarlo en manos de Joás por haber adorado a los dioses de Edom. 21 El rey Joás no tuvo más remedio que enfrentarse a Amasías en Bet Semes, que está en el territorio de Judá. 22 El ejército de Joás derrotó al de Amasías, y los soldados huyeron a sus casas. 23 Joás hizo prisionero a Amasías en Betsemes y luego se dirigió a Jerusalén, donde derribó ciento ochenta metros de la muralla de la ciudad, desde la Puerta de Efraín hasta la Puerta de la Esquina. 24 Se apoderó de todo el oro, la plata y los objetos que había en el Templo de Dios bajo el cuidado de Obededón, y también se adueñó de los tesoros del palacio. Tomó luego varios rehenes y regresó a Samaría. 25 Amasías, rey de Judá, vivió quince años más que Joás, rey de Israel. 26 Todo lo que hizo Amasías está escrito en el libro de la Historia de los Reyes de Judá. 27 Algunos hombres planearon matar a Amasías en la ciudad de Jerusalén, porque él se había olvidado de Dios. Entonces Amasías escapó a la ciudad de Laquis, pero lo siguieron hasta allí y lo mataron. 28 Su cuerpo fue cargado sobre un caballo y llevado a Jerusalén, la ciudad de David, donde lo sepultaron en la tumba de sus antepasados. |