Salmos 147 - Biblia Martin Nieto1 ¡Qué bueno es cantar para el Señor!, ¡qué agradable alabar a nuestro Dios! 2 El Señor reconstruye Jerusalén y reúne a los dispersos de Israel, 3 él cura los corazones rotos y venda sus heridas. 4 Él cuenta el número de las estrellas y llama a cada una por su nombre. 5 Nuestro Señor es grande y todopoderoso, su inteligencia es infinita. 6 El Señor sostiene a los humildes y humilla hasta el polvo a los malvados. 7 Cantad al Señor la acción de gracias, tocad el arpa para nuestro Dios. 8 Él cubre de nubes el cielo, prepara la lluvia para la tierra y hace brotar hierba en los montes; 9 él da el alimento a los ganados y a las crías del cuervo cuando chillan. 10 No tiene en cuenta el brío del caballo ni se complace en los músculos del hombre; 11 el Señor se complace en sus amigos, en aquellos que confían en su amor. 12 Glorifica al Señor, Jerusalén; alaba a tu Dios, Sión. 13 Él reforzó los cerrojos de tus puertas y bendijo a tus hijos dentro de tus murallas; 14 hace reinar la paz en tus fronteras y te sacia con la flor del trigo; 15 envía sus órdenes a la tierra y su palabra corre velozmente; 16 manda la nieve como lana, esparce la escarcha cual ceniza; 17 arroja sus granizos como migas de pan y con el frío las aguas se congelan; 18 envía su palabra y las derrite, hace soplar el viento y las aguas vuelven a correr. 19 Él anuncia su palabra a Jacob, sus leyes y sus decretos a Israel. 20 Esto no lo ha hecho con ningún otro pueblo, no les dio a conocer sus mandamientos. ¡Aleluya! |
Evaristo Martín Nieto©