Salmos 118 - Nueva Biblia Española (1975)

¹ Den gracias al Señor, porque es bueno, porque es eterno su amor.

² Diga la casa de Israel: es eterno su amor;

³ diga la casa de Aarón: es eterno su amor;

⁴ digan los fieles del Señor: es eterno su amor.

⁵ En el asedio clamé al Señor, y me respondió dándome espacio.

⁶ El Señor está conmigo; no temo, ¿qué podrá hacerme el hombre?

⁷ El Señor está conmigo y me auxilia, veré la derrota de mis adversarios.

⁸ Mejor es refugiarse en el Señor que fiarse de los hombres,

⁹ mejor es refugiarse en el Señor que fiarse de los jefes.

¹⁰ Todos los pueblos me rodeaban, en el nombre del Señor los rechacé;

¹¹ me rodeaban cerrando el cerco, en el nombre del Señor los rechacé;

¹² me rodeaban como abejas, se apagaron como fuego de zarzas, en el nombre del Señor los rechacé.

¹³ Empujaban y empujaban para derribarme, pero el Señor me ayudó;

¹⁴ El Señor es mi fuerza y mi brío, él es mi salvación.

¹⁵ Escuchen cantos de victoria en las tiendas de los vencedores: 'La diestra del Señor hace proezas,

¹⁶ la diestra del Señor se exalta, la diestra del Señor hace proezas'.

¹⁷ No he de morir, viviré para contar las hazañas del Señor.

¹⁸ Me escarmentó, me escarmentó el Señor, pero no me entregó a la muerte.

¹⁹ Ábranme las puertas del triunfo y entraré para dar gracias al Señor.

²⁰ Esta es la puerta del Señor: los vencedores entrarán por ella.

²¹ Te doy gracias, porque me escuchaste y fuiste mi salvación.

²² La piedra que desecharon los constructores es ahora la piedra angular:

²³ es el Señor quien lo ha hecho, ha sido un milagro patente.

²⁴ Este es el día en que actuó el Señor: ¡a festejarlo y a celebrarlo!

²⁵ Señor, danos la salvación; Señor, danos la prosperidad.

²⁶ Bendito el que viene en nombre del Señor, los bendecimos desde la casa del Señor;

²⁷ el Señor es Dios: él nos ilumina. Ordenen una procesión con ramos hasta los ángulos del altar.

²⁸ Tú eres mi Dios, te doy gracias; Dios mío, yo te ensalzo.

²⁹ 'Den gracias al Señor, porque es bueno, porque es eterno su amor'.