Job 10 - Nueva Biblia Española (1975)1 Estoy hastiado de la vida: me voy a entregar a las quejas, desahogando la amargura de mi alma. 2 Pediré a Dios: 'No me condenes, hazme saber qué tienes contra mí'. 3 ¿Te parece bien oprimirme y desdeñar la obra de tus manos, mientras alumbras los designios del malvado? 4 ¿Tienes ojos de carne o ves como ven los hombres? 5 ¿Son tus días como los de un mortal y tus años como los del hombre, 6 tú que indagas mi culpa y examinas mi pecado, 7 aunque sabes que no soy culpable y que nadie me librará de tus manos? 8 Tus manos me formaron, ellas modelaron todo mi contorno, y ¿ahora me aniquilas? 9 Recuerda que me hiciste de barro, y ¿me vas a devolver al polvo? 10 ¿No me vertiste como leche?, ¿no me cuajaste como queso?, 11 ¿no me forraste de carne y piel?, ¿no me tejiste de huesos y tendones?, 12 ¿no me otorgaste vida y favor, y tu providencia no custodió mi espíritu? 13 Y con todo, algo te guardabas, ahora sé que pensabas esto: 14 que si pecaba, me pondrías vigilancia y no me dejarías impune; 15 que si era culpable, ¡ay de mí!; que si era inocente, no levantaría cabeza, y me saciaría de afrentas y miserias; 16 que si la levantaba, me darías caza como un león, repitiendo tus proezas contra mí, 17 renovando tus testigos frente a mí, redoblando tu cólera contra mí, lanzando tropas de refresco sobre mí. 18 Entonces, ¿por qué me sacaste del vientre? Pude haber muerto sin que unos ojos me vieran 19 y ser como si no hubiera existido, conducido del vientre al sepulcro. 20 ¡Qué pocos son mis días! Que Dios acabe y me dé una tregua, y tendré un instante de alegría, 21 antes de partir, para no volver, al país de tinieblas y sombras, 22 a la tierra lóbrega y opaca, de confusión y negrura, donde la misma claridad es sombra. |
Luis Alonso Schökel y Juan Mateos, 1975 ©, Editada por Ediciones Cristiandad.