Ezequiel 4 - Nueva Biblia Española (1975)1 Y tú, hijo de Adán, toma un adobe, póntelo delante y graba en él una ciudad, 2 ponle cerco, construye torres de asalto contra ella, y haz un terraplén contra ella; pon tropas contra ella y emplaza arietes a su alrededor. 3 Y tú toma una sartén de hierro y ponía como valladar de hierro entre ti y la ciudad; dirige contra ella tu rostro; quedará sitiada y le apretarás el cerco. Es una señal para la casa de Israel. 4 Y tú, acuéstate del lado izquierdo, y te echaré encima la culpa de la casa de Israel. Los días que estés así acostado cargarás con su culpa. 5 Yo te señalo en días los años de su culpa (trescientos noventa días) para que cargues con la culpa de la casa de Israel. 6 Cumplidos éstos, te acostarás del lado derecho y cargarás con la culpa de la casa de Judá cuarenta días: un día por cada año te señalo. 7 Dirigirás el rostro y el brazo desnudo hacia el cerco de Jerusalén y profetizarás contra ella. 8 Mira, te amarro con sogas y no podrás cambiar de lado hasta que cumplas los días de tu apretura. 9 Y tú, toma trigo y cebada, fríjoles y lentejas, mijo y escanda: échalo todo en una vasija y con ello hazte de comer. (Eso comerás trescientos noventa días, todos los días que estés echado de lado). 10 Comerás tasado tu alimento: una ración diaria de ocho onzas, a una hora fija la comerás. 11 Beberás el agua medida: la sexta parte de una cantarilla, a una hora fija la beberás. 12 Comerás una hogaza de cebada que cocerás delante de ellos sobre excremento humano. 13 Y dijo el Señor: Los hijos de Israel comerán un pan impuro en las naciones por donde los disperse. 14 Yo repliqué: -¡Ay Señor! Mira que yo nunca me he contaminado; desde muchacho nunca he comido carne de animal muerto o despedazado por una fiera; nunca ha entrado en mi boca carne de desecho. 15 Me respondió: -Está bien, te concedo que prepares tu pan no sobre excremento humano, sino sobre boñigas. 16 Y añadió: -Hijo de Adán, cortaré el sustento del pan en Jerusalén: comerán el pan tasado y con susto, beberán el agua medida y con miedo, 17 para que, al faltarles el pan y el agua, se consuman por su culpa, y todo el mundo se horrorice. |
Luis Alonso Schökel y Juan Mateos, 1975 ©, Editada por Ediciones Cristiandad.