En aquel tiempo, Herodes el tetrarca, el gobernador de la región de Galilea, oyó la fama de Jesús,
Marcos 8:15 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia Él les advirtió a sus discípulos: – Miren, tengan cuidado de la levadura de los fariseos y de la levadura de Herodes. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y él les mandó, diciendo: Mirad, guardaos de la levadura de los fariseos, y de la levadura de Herodes. Biblia Nueva Traducción Viviente Mientras cruzaban el lago, Jesús les advirtió: «¡Atención! ¡Tengan cuidado con la levadura de los fariseos y con la de Herodes!». Biblia Católica (Latinoamericana) De repente él les hizo esta advertencia: 'Abran los ojos y cuídense tanto de la levadura de los fariseos como de la de Herodes. La Biblia Textual 3a Edicion Y les ordenó diciendo: Mirad, guardaos de la levadura de los fariseos° y de la levadura de Herodes. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Él se puso a recomendarles: '¡Estad alerta! Tened cuidado con la levadura de los fariseos y con la levadura de Herodes'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y les mandó, diciendo: Mirad, guardaos de la levadura de los fariseos, y de la levadura de Herodes. |
En aquel tiempo, Herodes el tetrarca, el gobernador de la región de Galilea, oyó la fama de Jesús,
Porque Herodes había arrestado a Juan, lo encadenó y lo puso en prisión por culpa de Herodías, la mujer de su hermano Felipe;
En el cumpleaños de Herodes, la hija de Herodías bailó muy bien en la fiesta, y le agradó a Herodes,
Posteriormente, llegaron unos fariseos y herodianos a donde estaba Jesús para ponerle una trampa.
Los discípulos se olvidaron de llevar comida, y solamente tenían un pan en la barca.
Entre los discípulos pensaban por qué Jesús les había dicho eso; creían que era porque se habían olvidado de llevar comida.
Y Jesús continuó diciendo: – Por favor, cuídense de toda avaricia, porque el perfeccionamiento de la vida plena no depende de tener muchos bienes.
Testifico con mi corazón, delante de Dios y de Jesucristo y también de los ángeles escogidos, con el propósito de que guardes estas cosas sin ningún prejuicio y no hagas nada mediocremente.
Te encargo todas estas cosas delante de Dios, que es el fundamento de la vida y de Jesucristo, el que confesó y dio testimonio con su propia vida ante Poncio Pilatos,
Recuérdales estas cosas, testificando delante de Dios, que no discutan con palabras fuertes, porque esto no edifica a nadie e inclusive arruina la vida de las personas que las oyen.