Pero los judíos persuadieron a las mujeres piadosas y distinguidas, también a los gobernantes de la ciudad, para que se pusieran en contra de Pablo y de Bernabé, y provocaron una persecución contra ellos, los maltrataron y los expulsaron de la región.
En eso llegaron de Antioquia e Iconio unos judíos, que convencieron a la multitud que estuvieran en contra de Pablo, ellos lo apedrearon hasta dejarlo inconsciente y lo arrastraron fuera de la ciudad; pensaron que Pablo estaba muerto.
donde se quedó tres meses. Como los judíos tramaban un atentado contra él cuando estaba a punto de embarcarse para Siria, decidió regresar por Macedonia.
he viajado de aquí para allá continuamente y peligrosamente; he estado en peligro en los ríos, en peligro de ladrones, fui amenazado por mis compatriotas y por los que no son judíos; también he estado en peligro en las ciudades, en los lugares desiertos y en los mares; he estado en peligro entre los falsos hermanos;