Y esto dice él a todos los hombres: «Escuchen: temer al Señor es verdadera sabiduría; abandonar el mal es verdadero entendimiento».
Salmos 4:4 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 No pequen permitiendo que el enojo los controle. Medítenlo cuando por la noche vayan a descansar. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Temblad, y no pequéis; Meditad en vuestro corazón estando en vuestra cama, y callad. Selah Biblia Nueva Traducción Viviente No pequen al dejar que el enojo los controle; reflexionen durante la noche y quédense en silencio. Interludio Biblia Católica (Latinoamericana) Si tienen rabia, no se arriesguen,
guárdenlo para ustedes, en la cama,
y quédense luego callados. La Biblia Textual 3a Edicion ¡Temblad, y no pequéis!° Meditad° en vuestro corazón sobre vuestro lecho, Estad en silencio. Selah Biblia Serafín de Ausejo 1975 Sabed que el Señor distingue a sus amados, que él me escucha al invocarle. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Asombraos, y no pequéis: Meditad en vuestro corazón sobre vuestra cama, y callad. (Selah) |
Y esto dice él a todos los hombres: «Escuchen: temer al Señor es verdadera sabiduría; abandonar el mal es verdadero entendimiento».
Grandes hombres me han perseguido sin causa, pero mi corazón solamente teme a tu palabra.
Oro así porque sé que me responderás, oh Dios. ¡Sí!, inclinas a mí tu oído y escuchas mi oración.
Clamé al Señor a voz en cuello, y él me respondió desde su monte santo.
Que todos en el mundo teman al Señor, y ante él sientan sobrecogido respeto.
¡Silencio! ¡Sepan que yo soy Dios! ¡Todas las naciones del mundo me honrarán!
Entonces mis noches estaban llenas de cánticos jubilosos. Busco en mi alma y pienso en cómo han cambiado las cosas.
El camino del justo se aparta del mal; el que quiere salvar su vida, se fija por dónde va.
Con amor y verdad se perdona el pecado, y con temor del Señor se evita el mal.
No creas que eres tan sabio como para no tenerle miedo al mal. Honra al Señor y huye del mal,
¿No me tienen respeto alguno?, pregunta el Señor Dios. ¿Cómo es que ni siquiera tiemblan en mi presencia? Mi poder es tan grande que yo fui quien establecí sus límites a los mares del mundo y ellos por más que se embravezcan y rujan, no podrán traspasarlos. ¿No es de ser temido y respetado un Dios así de poderoso?
»En cambio, el Señor está en su santo templo, ¡guarden silencio respetuoso delante de él los habitantes de toda la tierra!».
Examínense para ver si siguen teniendo fe en el Señor. ¡Pónganse a prueba a ver si la pasan! ¿Se echa de ver que Cristo está en ustedes?
Si se enojan, no cometan el pecado de dejar que el enojo les dure todo el día.