Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Proverbios 8:30 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

yo estaba allí, a su lado. Yo era su continua alegría, disfrutaba estar siempre en su presencia;

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Con él estaba yo ordenándolo todo, Y era su delicia de día en día, Teniendo solaz delante de él en todo tiempo.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

era la arquitecta a su lado. Yo era su constante deleite, y me alegraba siempre en su presencia.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

yo estaba a su lado poniendo la armonía. Día tras día encontraba en eso mis delicias y continuamente jugaba en su presencia.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Yo estaba junto a Él como arquitecto, Y era su delicia todos los días, Regocijándome ante Él en todo tiempo,

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

allí estuve a su lado como arquitecto, haciendo sus delicias cada día, recreándome siempre en su presencia,

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Yo estaba con Él, ordenándolo todo; y era su delicia de día en día, regocijándome delante de Él en todo tiempo;

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Proverbios 8:30
8 Tagairtí Cros  

Vean a mi Siervo, a quien yo sostengo, mi elegido, en quien me deleito. En él he puesto mi Espíritu, él mostrará lo que es justicia a las naciones del mundo.


Pero mientras hablaba, una nube resplandeciente los cubrió y una voz dijo desde la nube: «Este es mi Hijo amado; en él me complazco. Obedézcanlo».


y una voz de los cielos dijo: «Este es mi Hijo amado, y en él me complazco».


A Dios nadie lo ha visto nunca; pero el Hijo único, que es Dios mismo y siempre está en unión con el Padre, nos ha enseñado cómo es, para que así lo podamos conocer.


¡Padre, glorifica tu nombre!». Entonces se oyó una voz del cielo que decía: «Ya lo glorifiqué y lo volveré a glorificar».


Salí del Padre y vine al mundo. Ahora dejo el mundo para volver al Padre».


Él nos rescató del reino de las tinieblas y nos trasladó al reino de su Hijo amado,