Ellos no tienen miedo de recibir malas noticias; pues están confiados en que el Señor los cuidará.
Proverbios 3:25 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 No temerás al desastre que venga de repente, ni a la desgracia que caiga sobre los malvados, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 No tendrás temor de pavor repentino, Ni de la ruina de los impíos cuando viniere, Biblia Nueva Traducción Viviente No hay por qué temer la calamidad repentina ni la destrucción que viene sobre los perversos, Biblia Católica (Latinoamericana) No temerás una catástrofe repentina o el ataque imprevisto de los malhechores. La Biblia Textual 3a Edicion No temerás el pavor repentino, Ni el ataque de los impíos cuando venga, Biblia Serafín de Ausejo 1975 No temerás el espanto repentino ni la tormenta que cae sobre el malvado, Biblia Reina Valera Gómez (2023) No tendrás temor de pavor repentino, ni de la ruina de los impíos cuando viniere: |
Ellos no tienen miedo de recibir malas noticias; pues están confiados en que el Señor los cuidará.
No tienes que temer al terror de la noche, ni asustarte por los peligros del día,
cuando el terror caiga sobre ustedes como una tormenta y los problemas y la angustia los arrastren como un torbellino.
Serás regida por un gobierno justo y honrado. Tus enemigos se mantendrán a distancia, vivirás en paz, el terror no se acercará.
Cada persona podrá vivir tranquila bajo su viña o su higuera, sin que nadie le robe su paz. ¡El Señor Todopoderoso lo ha prometido!
Y cuidaré mi templo como un vigilante, para impedir que ningún enemigo entre. ¡Nunca más un enemigo atacará a mi pueblo, pues ahora yo soy su poderoso guardián!
»Por lo tanto, cuando vean que aparece en el Lugar Santo la desoladora impureza de que habla el profeta Daniel (¡preste atención el lector!),
Cuando oigan rumores de guerras, no crean que ya estarán señalando mi retorno; habrá rumores y habrá guerra, pero todavía no será él fin.
Cuando oigan que hay guerras y revoluciones, no se asusten. Primero tienen que pasar estas cosas, pero todavía no vendrá el fin.
Pero si sufren por hacer lo que es justo, ¡dichosos sean! No le tengan miedo a nadie ni se asusten.