»No sigan a las mayorías que intenten hacer mal. Cuando estén en el estrado de los testigos, no inclinen sus testimonios a favor de la mayoría presente ni hacia el pobre, por el simple hecho de ser pobre.
Proverbios 28:21 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 No está bien ser parcial con nadie; hasta por un pedazo de pan se puede pecar. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Hacer acepción de personas no es bueno; Hasta por un bocado de pan prevaricará el hombre. Biblia Nueva Traducción Viviente Nunca es bueno mostrar parcialidad, incluso algunos hacen lo malo por un simple pedazo de pan. Biblia Católica (Latinoamericana) Uno debiera ser imparcial, pero hay algunos que se venden por un trozo de pan. La Biblia Textual 3a Edicion Hacer acepción de personas no es bueno, Pero, ¡hasta por un bocado de pan puede prevaricar el hombre! Biblia Serafín de Ausejo 1975 No es bueno discriminar a las personas; por un trozo de pan el hombre delinque. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Hacer acepción de personas, no es bueno. Hasta por un bocado de pan prevaricará el hombre. |
»No sigan a las mayorías que intenten hacer mal. Cuando estén en el estrado de los testigos, no inclinen sus testimonios a favor de la mayoría presente ni hacia el pobre, por el simple hecho de ser pobre.
»No acepten soborno, porque los inclina hacia la parcialidad y daña la causa del inocente.
También estos son dichos de los sabios: Es malo mostrar favor hacia alguien en el juicio.
Por unos pocos puñados de cebada o un pedazo de pan, ¿han de apartar a mi pueblo de mí? ¡Han conducido a la muerte a aquellos que no debían morir! ¡Y han prometido vida a aquellos que no debían vivir, al mentir a mi pueblo, y cuánto lo aprecian ellos!”.
Los hombres de Israel se entregan a borracheras y se van en busca de prostitutas. Aman más la vergüenza que el honor.
Esto es lo que el Señor dice contra los falsos profetas, los que descarrían a este pueblo: «Ustedes le anuncian la paz a quienes les dan de comer, pero a quienes no les dan nada, les anuncian la guerra.
¡Se han vuelto expertos en hacer lo malo, a tal punto que no hay quien les supere en maldad! El gobernador exige recompensas, el juez acepta sobornos y el rico hace lo que le da la gana. ¡Por eso la ciudad se ha pervertido!
Esos maestros no están trabajando para Cristo nuestro Señor, sino para su propio beneficio. Le hablan a la gente con palabras bonitas y engañan fácilmente a los ingenuos.
“Cuando tomen decisiones”, les dije; “no favorezcan a un hombre porque sea rico; sean justos con el grande y con el pequeño. No teman si a ellos no les agrada el fallo de ustedes, porque ustedes son jueces en el nombre de Dios. Los casos demasiado difíciles tráiganmelos a mí, y yo los resolveré”.
Tan ambiciosos serán esos maestros que les dirán cualquier cosa con tal de sacarles dinero. Pero Dios hace tiempo que ha dictado sentencia contra ellos y su destrucción está por caerles encima.