»Escúchame, y te responderé por experiencia propia, confirmada con la experiencia de los sabios varones que recibieron esto de sus padres, nuestros antepasados, los únicos a quienes se les dio la tierra.
Proverbios 24:30 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Pasé junto al campo del perezoso, junto a la viña del que no tiene sentido común. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Pasé junto al campo del hombre perezoso, Y junto a la viña del hombre falto de entendimiento; Biblia Nueva Traducción Viviente Pasé por el campo de un perezoso, por el viñedo de uno que carece de sentido común. Biblia Católica (Latinoamericana) Pasé al lado del campo del flojo, caminé alrededor de la viña de un tonto: La Biblia Textual 3a Edicion Pasé junto al campo del perezoso, Por la viña de un hombre sin entendimiento, Biblia Serafín de Ausejo 1975 He pasado por el campo de un perezoso y por la viña de un insensato, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pasé junto al campo del perezoso, y junto a la viña del hombre falto de entendimiento, |
»Escúchame, y te responderé por experiencia propia, confirmada con la experiencia de los sabios varones que recibieron esto de sus padres, nuestros antepasados, los únicos a quienes se les dio la tierra.
»La experiencia me ha enseñado la verdad de todo esto. Para bien tuyo, escucha mi consejo».
Los rectos verán estas cosas y se alegrarán, mientras los malvados serán acallados.
Fui joven y estoy viejo, y en todos mis años jamás vi al justo en la miseria; tampoco he visto a los hijos de los justos pasar hambre.
En los labios del sabio hay palabras de sabiduría, pero para el necio son los azotes en la espalda.
El que trabaja su tierra tendrá abundante comida, pero el que vive soñando no es inteligente.
El perezoso desea mucho pero obtiene poco; el que trabaja obtendrá todo lo que desea.
Pero al que se acuesta con la mujer de otro le falta la capacidad de pensar, pues se destruye a sí mismo.
He visto de todo en esta loca vida, inclusive que a los justos los destruye su justicia y los malvados disfrutan de larga vida. No seas, pues, ni demasiado bueno ni demasiado sabio. ¿Para qué vas a matarte? Por otra parte, no seas tampoco demasiado malo: ¡no seas necio! ¿Para qué morir antes de tiempo?