El hombre se llena con el fruto de su boca, y se sacia con lo que habla.
Del fruto de la boca del hombre se llenará su vientre; Se saciará del producto de sus labios.
Las palabras sabias satisfacen igual que una buena comida; las palabras acertadas traen satisfacción.
De todo lo que has dicho te llenarás el estómago; comerás hasta saciarte de lo que ha salido de tus labios.
El vientre del hombre será llenado con el fruto de su boca, Del producto de sus labios será saciado.
Del fruto de su boca sacia el hombre su vientre, del fruto de sus labios se sacia.
Del fruto de su boca el hombre saciará su vientre; del producto de sus labios será saciado.
El que habla el bien, cosechará el bien, pero los traidores tienen hambre de violencia.
El necio recibirá lo que se merece por su necedad; el hombre bueno recibirá recompensa por sus acciones.
Más resiste el hermano ofendido que una ciudad amurallada, los litigios son como cerrojos de ciudadelas.
Porque es grato que las guardes muy dentro de ti, y las tengas listas en tus labios para repetirlas.
Para que conozcas la verdad y de esta manera puedas responder correctamente a quien te pregunte.