Porque el Señor protege los pasos de los justos; pero los pasos de los impíos conducen a la perdición.
Proverbios 10:29 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 El Señor protege a los rectos, pero destruye a los que hacen mal. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 El camino de Jehová es fortaleza al perfecto; Pero es destrucción a los que hacen maldad. Biblia Nueva Traducción Viviente El camino del Señor es una fortaleza para los que andan en integridad, pero destruye a los que hacen maldad. Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé previó un refugio para el hombre íntegro, y la ruina para los que hacen el mal. La Biblia Textual 3a Edicion El camino de YHVH es refugio para el íntegro, Pero ruina para los malhechores. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yahveh es refugio para el hombre íntegro; pero es ruina para los malhechores. Biblia Reina Valera Gómez (2023) El camino de Jehová es fortaleza al íntegro; pero habrá destrucción para los que obran iniquidad. |
Porque el Señor protege los pasos de los justos; pero los pasos de los impíos conducen a la perdición.
Pero los malos perecerán. Los enemigos de Dios se secarán como la hierba, y desaparecerán como el humo.
Continuamente crecerán en fortaleza y cada uno se presentará ante Dios en Sion.
que si bien los malvados florecen como malas hierbas, lo único que les espera es eterna destrucción.
Cuando muere el malvado, todas sus esperanzas e ilusiones de poder, mueren con él.
La justicia protege al hombre que es recto, pero la maldad destruye al pecador.
Pero los que esperan en el Señor renovarán sus fuerzas: emprenderán vuelo como si tuvieran alas de águilas, correrán y no se cansarán, caminarán y no desfallecerán.
Todo aquel que es sabio y prudente entenderá estas cosas. Todo aquel que es inteligente, que escuche y siga mis consejos. Pues los senderos del Señor son verdaderos y justos, y las personas buenas caminan por ellos. Pero la gente mala se pierde en sus propios malos pasos.
»Yo mismo fortaleceré a mi pueblo, y haré que avancen confiados en mi permanente ayuda. Lo afirmo yo, que soy el Señor Todopoderoso».