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Oseas 6:8 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

»Galaad es una ciudad de gente malvada, las huellas de la violencia están por todas partes.

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Biblia Reina Valera 1960

Galaad, ciudad de hacedores de iniquidad, manchada de sangre.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

»Galaad es una ciudad de pecadores, marcada con huellas de sangre.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Galaad, ciudad de malhechores, está llena de huellas de sangre.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Galaad es una villa de malhechores, Llena de huellas de sangre.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Galaad es ciudad de malhechores, manchada con huellas de sangre.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Galaad, ciudad de obradores de iniquidad, ensuciada de sangre.

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Oseas 6:8
17 Tagairtí Cros  

Cuando llegaron a la gran roca que está en Gabaón, se encontraron cara a cara con Amasá. Joab usaba su uniforme ajustado con un cinturón y cargaba una daga envainada junto al muslo, la cual se le cayó mientras caminaba. Joab la recogió y se acercó a saludar a Amasá: «Estoy contento de verte, hermano mío» —dijo Joab—, y lo tomó de la barba con la mano derecha como para besarlo. Amasá no notó la daga que Joab tenía en la mano izquierda. Así que Joab se la clavó en el estómago, de tal manera que se le salieron las entrañas. No necesitó dar un segundo golpe, porque Amasá murió instantáneamente. Joab y su hermano Abisay lo dejaron muerto allí mismo, y continuaron la persecución de Sabá.


Cuando Abner regresó a Hebrón, Joab lo llevó a la entrada de la ciudad, como si quisiera conversar con él secretamente. Una vez allí, Joab sacó su cuchillo y se lo clavó en el vientre. De esta manera Joab vengó la muerte de su hermano Asael.


»Escucha mis instrucciones. Tú sabes que Joab hijo de Sarvia mató a mis dos generales, a Abner hijo de Ner y a Amasá hijo de Jéter. Él hizo que pareciera un acto de guerra, pero fue hecho en tiempo de paz. Al hacer eso, no sólo se manchó él de sangre, sino que también me hizo a mí culpable.


Acechan en las callejuelas oscuras de la ciudad y asesinan a los inocentes que pasan.


No me dejes desear cosas malas, ni que participe en hechos malvados; no me dejes compartir banquetes con los que hacen mal.


Guárdame de estos criminales, de estos asesinos.


Engañan y estafan a todos. Cuanto hacen es pecaminoso; la violencia es su marca distintiva.


Yo había estado tan confiado como oveja o buey camino del matadero, que no sabe lo que le espera. ¡No sabía que tramaban mi muerte! «Acabemos con este hombre y todos sus mensajes», decían, «matémoslo para que de él no quede ni el recuerdo».


Los que viven en Galaad no hacen sino mentir, sólo pensando en cometer maldades. En Guilgal ofrecen bueyes como sacrificios rituales a sus dioses falsos; por eso sus altares serán destruidos y sus piedras esparcidas por el campo.


Jacob huyó a Aram y cuidando ovejas se ganó una esposa, tuvo que trabajar muchos años como pastor para obtener la mano de su novia.


Ustedes blasfeman, mienten, matan, roban y cometen adulterio. ¡Es tanta la violencia que los homicidios parecen no tener fin!


»Escuchen esto, ustedes sacerdotes, y todos los jefes de Israel; escuchen, todos los miembros de la familia real: Contra ustedes se ha dictado sentencia, porque han engañado al pueblo con los ídolos en Mizpa y Tabor,


Ya no hay gente honrada en este país. ¡Ya no queda en este país ni una sola persona que practique la justicia! Son todas homicidas, que se vuelven contra sus propios familiares. ¡Unos a otros buscan hacerse daño!


Le pidieron a Festo con insistencia que les hiciera el favor de que Pablo fuera llevado a Jerusalén. Ellos planeaban matarlo cuando viniera en camino.


Gad les dio cuatro ciudades con sus tierras de pastoreo: Ramot de Galaad (ciudad de refugio), Majanayin, Hesbón y Jazer.