Envió mensajeros por todo Israel convocando a todos los que adoraban a Baal. Ni uno solo faltó, y llenaron el santuario de Baal, de un extremo a otro.
Números 22:22 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Pero Dios estaba enojado, y envió un ángel para que en el camino le diera muerte. Mientras Balán y los dos siervos cabalgaban juntos, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y la ira de Dios se encendió porque él iba; y el ángel de Jehová se puso en el camino por adversario suyo. Iba, pues, él montado sobre su asna, y con él dos criados suyos. Biblia Nueva Traducción Viviente pero Dios se enojó porque Balaam iba con ellos. Así que envió al ángel del Señor a pararse en medio del camino para impedirle el paso. Mientras Balaam y dos de sus sirvientes iban montando, Biblia Católica (Latinoamericana) Estalló la cólera de Dios contra Balaam cuando todavía estaba en camino. El ángel de Yavé se paró en medio del camino para cerrarle el paso, mientras venía en su burra acompañado de dos sirvientes. La Biblia Textual 3a Edicion Pero mientras él iba, la ira de Dios se encendió, y el ángel de YHVH se colocó en el camino para oponerse a él. Y él iba montado en su asna, y sus dos siervos con él, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero su partida encendió la cólera de Dios y el ángel de Yahveh se plantó en medio del camino para cerrarle el paso. Balaán iba montado en su burra y le acompañaban sus criados. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el furor de Dios se encendió porque él iba; y el Ángel de Jehová se puso en el camino por adversario suyo. Iba, pues, él montado sobre su asna, y con él dos mozos suyos. |
Envió mensajeros por todo Israel convocando a todos los que adoraban a Baal. Ni uno solo faltó, y llenaron el santuario de Baal, de un extremo a otro.
»Miren, estoy enviando un ángel delante de ustedes, para que lleguen con seguridad a la tierra que les he preparado.
Durante el viaje, Moisés y su familia se detuvieron para pasar la noche. Allí el Señor se le apareció y amenazó con matarlo.
Ha atacado como si fuera un guerrero enemigo, dando muerte con sus flechas a nuestros muchachos más valiosos del país. Como el fuego que destruye una tienda valiosa, así derramó su enojo contra Jerusalén.
Y el Señor le dijo a Oseas: «Llámalo Jezrel, pues en el valle de Jezrel estoy por castigar a la dinastía del rey Jehú. Porque pronto le haré pagar por los asesinatos que cometió en el valle de Jezrel. Así pondré fin al tiempo de Israel como reino independiente, pues acabaré con el poder que tiene como nación».
la burra de Balán vio repentinamente al ángel del Señor que estaba en el camino con una espada desenvainada. La burra se apartó del camino y entró en un campo, pero Balán la golpeó hasta que volvió al camino.
―¿Por qué golpeaste a tu burra tres veces? —le preguntó el ángel—. He venido para detenerte porque vas caminando hacia la destrucción.
El ángel le dijo: ―Ve con esos hombres, pero hablarás solamente lo que yo te diga. Balán, siguió con ellos.