Convirtió el mar en tierra seca, y el pueblo cruzó el río a pie. ¡Regocijémonos en él!
Nehemías 9:11 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Tú dividiste el mar, para que tu pueblo pudiera pasarlo por tierra seca, y luego destruiste a tus enemigos en las profundidades del mar. ¡Se hundieron como piedras bajo las impetuosas aguas! Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Dividiste el mar delante de ellos, y pasaron por medio de él en seco; y a sus perseguidores echaste en las profundidades, como una piedra en profundas aguas. Biblia Nueva Traducción Viviente ¡Dividiste el mar para que tu pueblo pudiera cruzarlo por tierra seca! Luego arrojaste a sus perseguidores a las profundidades del mar. Se hundieron como piedras en aguas turbulentas. Biblia Católica (Latinoamericana) Tú abriste el mar ante ellos, pasaron por medio del mar por suelo seco, y arrojaste al fondo de las aguas a los que los perseguían, como una piedra en aguas torrentosas. La Biblia Textual 3a Edicion Y partiste el mar delante de ellos, y pasaron en seco por el medio del mar, mientras que a sus perseguidores los lanzaste en las profundidades, como una piedra, a las aguas violentas. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Tú hendiste el mar ante ellos, les hiciste pasar a pie enjuto por medio del mar, y hundiste en el abismo a sus perseguidores como se hunde una piedra en aguas profundas. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y dividiste el mar delante de ellos, y así pasaron por medio de él en seco; y a sus perseguidores echaste en las profundidades, como una piedra en turbulentas aguas. |
Convirtió el mar en tierra seca, y el pueblo cruzó el río a pie. ¡Regocijémonos en él!
Porque él abrió el mar ante ellos, y los guio a través del mismo. ¡Como muros a ambos lados de ellos se detuvieron las aguas!
El Señor peleará por ustedes, de modo que ustedes no tendrán que levantar ni un solo dedo».
Las ruedas de sus carros de guerra se atascaron, de modo que avanzaban muy lentamente. Entonces los egipcios gritaron: «¡Salgamos de aquí, porque el Señor está peleando por ellos contra nosotros!».
En cambio, el pueblo de Israel cruzó el mar por tierra seca, pues las aguas habían formado muros a ambos lados de ellos.
Has hecho cosas increíbles en el país de Egipto, hechos que se recuerdan hasta el presente. Y has continuado realizando grandes milagros en Israel y en todo el mundo. Le has dado gran fama a tu nombre, tal como la tiene hoy.
No quiero, hermanos que ignoren lo que le sucedió a nuestro pueblo siglos atrás, en el desierto. Todos estuvieron bajo la nube y todos atravesaron el mar.
Por la fe, los israelitas cruzaron el Mar Rojo como por tierra seca. Y cuando los egipcios quisieron cruzarlo, se ahogaron.
Entonces un ángel poderoso tomó una peña con forma de piedra de molino y la arrojó en el mar diciendo: «Babilonia, la gran ciudad, será arrojada como yo arrojé esta piedra, y desaparecerá para siempre.