Entonces el rey Darío envió este mensaje al gobernador Tatenay, a Setar Bosnay y a los demás funcionarios de la región occidental del Éufrates: Salgan de Jerusalén
Nehemías 2:7 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Luego añadí: ―Si Su Majestad está de acuerdo, le pido el favor de que envíe cartas para los gobernadores del otro lado del río Éufrates, para que me dejen pasar por sus países en el viaje a Judá. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Además dije al rey: Si le place al rey, que se me den cartas para los gobernadores al otro lado del río, para que me franqueen el paso hasta que llegue a Judá; Biblia Nueva Traducción Viviente Además le dije al rey: —Si al rey le agrada, permítame llevar cartas dirigidas a los gobernadores de la provincia al occidente del río Éufrates, indicándoles que me permitan viajar sin peligro por sus territorios de camino a Judá. Biblia Católica (Latinoamericana) Dije también al rey: 'Si el rey así lo quiere, despache conmigo cartas a los gobernadores de la provincia que está más allá del Eufrates para que me dejen pasar hasta que llegue a Judá. La Biblia Textual 3a Edicion Dije además al rey: Si al rey le parece bien, que se me den cartas para los gobernadores de Más Allá del Río,° para que me franqueen el paso hasta que llegue a Judá, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Todavía añadí al rey: 'Si le parece bien al rey, dénseme cartas para los gobernadores de la Transeufratina, para que me dejen pasar hasta que llegue a Judá, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Además dije al rey: Si place al rey, que se me den cartas para los gobernadores del otro lado del río, para que me franqueen el paso hasta que llegue a Judá; |
Entonces el rey Darío envió este mensaje al gobernador Tatenay, a Setar Bosnay y a los demás funcionarios de la región occidental del Éufrates: Salgan de Jerusalén
Yo, el rey Artajerjes, envío este decreto a todos los tesoreros de las provincias que están al occidente del río Éufrates y les ordeno que le entreguen a Esdras cuanto él les pida, porque él es sacerdote y maestro de la ley del Dios del cielo.
Me daba vergüenza pedirle al rey que nos proporcionara soldados y caballería que nos protegieran de los enemigos que pudiera haber en el camino, pues le habíamos dicho que nuestro Dios protege a todos los que lo adoran, y que su ira se abate sólo sobre los que lo abandonan.
Y los decretos del rey fueron entregados a los gobernadores y funcionarios de las provincias que quedan al occidente del río Éufrates. Todos ellos estuvieron listos a colaborar en la reconstrucción del templo.
Cuando llegué a las provincias que estaban al occidente del río Éufrates, entregué las cartas del rey a los gobernadores (el rey, debo añadir, había enviado conmigo oficiales y soldados de caballería para que me protegieran).
A continuación de ellos estaban Melatías de Gabaón, Jadón de Meronot y los hombres de Gabaón y Mizpa. (Las regiones de Gabaón y Mizpa estaban bajo la dirección del gobernador de la provincia que está al oeste del río Éufrates).