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Nahúm 3:16 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

Mercaderes tan numerosos como las estrellas llenaron la ciudad con muchas riquezas, pero tus enemigos pululan como langostas, y se las llevan.

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Biblia Reina Valera 1960

Multiplicaste tus mercaderes más que las estrellas del cielo; la langosta hizo presa, y voló.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Tus comerciantes se han multiplicado hasta llegar a ser más numerosos que las estrellas. Pero son como una nube de langostas que despojan la tierra y alzan el vuelo.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Habías multiplicado tus mercaderes más que las estrellas del cielo,

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La Biblia Textual 3a Edicion

La langosta muda la piel, y vuela; Aunque tus mercaderes sean más que las estrellas de los cielos,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

multiplica tus traficantes más que las estrellas del cielo: la langosta desplegó sus alas y voló.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Multiplicaste tus mercaderes más que las estrellas del cielo; el pulgón hizo presa, y voló.

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Nahúm 3:16
7 Tagairtí Cros  

Luego el Señor hizo que Abram saliera de su carpa, y le dijo: ―Intenta contar todas las estrellas que hay en el cielo, y verás que no puedes. ¡Pues, así de numerosos serán tus descendientes!


te bendeciré muchísimo. Tu descendencia será tan numerosa como las estrellas del cielo y como la arena del mar. Además, tus descendientes poseerán las ciudades de sus enemigos.


Tú hiciste que el pueblo israelita se multiplicara como las estrellas del cielo, y los hiciste entrar en la tierra que habías prometido a sus antepasados.


Dio una orden y millares de langostas acudieron, ¡muchísimos saltamontes!


¿Quién ha acarreado este desastre a Tiro, la que edificó imperios y fue reina de los mercaderes del mundo?


Y así como no se pueden contar las estrellas ni contarse los granos de arena de las playas, así los descendientes de mi servidor David y la descendencia de los levitas que para mí ministran se multiplicarán.


¡Todos los cultivos fueron devorados por las plagas! Primero vinieron las orugas y se comieron una parte. Luego vinieron las langostas y acabaron con otra parte. Después de estas vinieron sucesivamente pulgones y saltamontes y se comieron lo poco que quedaba.