Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Mateo 25:43 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

cuando fui forastero, me negaron hospitalidad; estuve desnudo y no me vistieron; enfermo y en prisión, y no me visitaron”.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

fui forastero, y no me recogisteis; estuve desnudo, y no me cubristeis; enfermo, y en la cárcel, y no me visitasteis.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Fui extranjero, y no me invitaron a su hogar. Estuve desnudo, y no me dieron ropa. Estuve enfermo y en prisión, y no me visitaron”.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

era forastero y no me recibieron en su casa; estaba sin ropa y no me vistieron; estuve enfermo y encarcelado y no me visitaron.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

fui forastero y no me acogisteis, estaba desnudo y no me cubristeis, enfermo y en prisión, y no me visitasteis.

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

era forastero y no me hospedasteis; estuve desnudo y no me vestisteis; enfermo y en la cárcel y no me visitasteis'.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

fui extranjero, y no me recogisteis; estuve desnudo, y no me cubristeis; enfermo, y en la cárcel, y no me visitasteis.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Mateo 25:43
10 Tagairtí Cros  

Si vi al que se moría de frío y no le di abrigo o lana de mis ovejas para que se calentara,


En vez de llevar mi rebaño a lugar seguro, lo han abandonado y lo han arriado hacia la destrucción. Ahora sobre ustedes descargaré mi gran cólera por el mal que les han causado. Voy a pasar revista de nuevo a sus malas obras para darles el castigo que se merecen.


Aun la gente común oprime y roba a los pobres y necesitados y cometen extorsión contra los extranjeros.


estuve desnudo y me vistieron; enfermo y en prisión, y me visitaron”.


Porque tuve hambre y no me alimentaron; sed y no me dieron de beber;


»Ellos responderán: “Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, sediento, forastero, desnudo, enfermo o en prisión y no te ayudamos?”.


Varios días más tarde, Pablo le propuso a Bernabé regresar a visitar las ciudades donde anteriormente habían predicado la palabra del Señor, a fin de ver cómo estaban los creyentes.


No se olviden de practicar la hospitalidad, porque de esa manera, algunos, sin darse cuenta, hospedaron ángeles.


Acuérdense de los presos, como si ustedes estuvieran presos con ellos. Acuérdense también de los que son maltratados como si ustedes mismos fueran los que sufren.


Allí fueron para pasar la noche. Pero, como nadie les ofreció hospedaje, acamparon en la plaza del pueblo.