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Mateo 14:27 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

Pero Jesús inmediatamente les gritó: ―¡Calma! ¡No tengan miedo! ¡Soy yo!

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Biblia Reina Valera 1960

Pero en seguida Jesús les habló, diciendo: ¡Tened ánimo; yo soy, no temáis!

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Pero Jesús les habló de inmediato: —No tengan miedo —dijo—. ¡Tengan ánimo! ¡Yo estoy aquí!

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Biblia Católica (Latinoamericana)

En seguida Jesús les dijo: 'Animo, no teman, que soy yo.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Pero enseguida° les habló, diciendo: ¡Tened ánimo, Yo soy, no temáis!

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Pero [Jesús] les habló en seguida: '¡Ánimo! Soy yo. No tengáis miedo'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Pero enseguida Jesús les habló, diciendo: ¡Tened ánimo; yo soy, no temáis!

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Mateo 14:27
21 Tagairtí Cros  

No temas, pues yo estoy contigo, no te desanimes. Yo soy tu Dios, yo te fortaleceré, yo te ayudaré, yo te sostendré con mi triunfante mano diestra.


Aunque seas despreciado, no temas, oh Israel, porque yo te auxiliaré. Yo soy el Señor, tu Redentor; yo soy el Santo de Israel.


¿Quién ha realizado tales proezas, dirigiendo los asuntos de las generaciones de los seres humanos conforme estas se suceden? ¡Yo, el Señor, el primero y el último! ¡Sólo yo soy!


Yo, sí, yo soy el que te conforta y te da todo este gozo. Así pues, ¿por qué temer a los simples mortales que cual la hierba se marchitan y desaparecen?


―Señor —le respondió Pedro—, si realmente eres tú, ordena que también yo camine sobre el agua y vaya hasta donde tú estás.


Jesús se les acercó y los tocó. ―Levántense —les dijo—. No tengan miedo.


―No teman —les dijo Jesús—. Digan a mis hermanos que salgan en seguida hacia Galilea, y allí me hallarán.


Varios hombres le trajeron a un paralítico tendido en un camastro. Cuando Jesús vio la fe que tenían, dijo al enfermo: ―¡Ten ánimo, hijo! ¡Te perdono tus pecados!


pues estaban muy espantados por lo que veían. Pero él en seguida les dijo: «Cálmense, soy yo, no tengan miedo».


Pero el ángel le dijo: ―No tengas miedo, Zacarías, pues Dios ha escuchado tus oraciones. Tu esposa Elisabet te dará un hijo, y lo llamarás Juan.


El ángel le dijo: ―No tengas miedo, María, porque Dios te ha concedido su favor.


»No tengan miedo, mi pequeño rebaño, porque el Padre de ustedes, en su bondad, quiere darles el reino.


Pero el ángel les dijo: «¡No tengan miedo! Les traigo buenas noticias que van a llenar de alegría a todo el pueblo:


También estaban asombrados Jacobo y Juan, hijos de Zebedeo, socio de Simón. Jesús le dijo a Simón: ―No tengas miedo, de ahora en adelante serás pescador de seres humanos.


Yo les he dicho estas cosas para que en mí encuentren paz. En este mundo van a sufrir, pero anímense, yo he vencido al mundo.


Pero él les dijo: «Soy yo, no tengan miedo».


A la noche siguiente, el Señor se le apareció a Pablo y le dijo: ―Ánimo. De la misma manera que has hablado de mí en Jerusalén, hablarás en Roma.