Y Moisés desapareció en la nube que cubría el monte, y estuvo allí cuarenta días y cuarenta noches.
Marcos 1:13 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 donde pasó cuarenta días, y era tentado por Satanás. Estaba entre las fieras y los ángeles lo servían. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y estuvo allí en el desierto cuarenta días, y era tentado por Satanás, y estaba con las fieras; y los ángeles le servían. Biblia Nueva Traducción Viviente donde Jesús fue tentado por Satanás durante cuarenta días. Estaba a la intemperie entre los animales salvajes, y los ángeles lo cuidaban. Biblia Católica (Latinoamericana) Estuvo cuarenta días en el desierto y fue tentado por Satanás. Vivía entre los animales salvajes y los ángeles le servían. La Biblia Textual 3a Edicion Y estuvo en el desierto cuarenta días, siendo tentado por Satanás, y estaba con las fieras, y los ángeles lo servían. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Permaneció en el desierto cuarenta días y Satanás lo puso a prueba. Estaba entre animales salvajes, y los ángeles le servían. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y estuvo allí en el desierto cuarenta días, siendo tentado por Satanás; y estaba con las fieras; y los ángeles le servían. |
Y Moisés desapareció en la nube que cubría el monte, y estuvo allí cuarenta días y cuarenta noches.
Moisés estuvo con el Señor en el monte durante cuarenta días y cuarenta noches; y en todo ese tiempo no comió ni bebió. Durante ese tiempo, Dios grabó el pacto, los Diez Mandamientos, sobre tablas de piedra.
¿No sabes que podría pedirle a mi Padre que me enviara doce mil ángeles y me los enviaría al instante?
El Espíritu Santo condujo a Jesús al desierto para que el diablo lo tentara.
Jesús, lleno del Espíritu Santo, volvió del Jordán y el Espíritu lo llevó al desierto.
Tras esto, y durante otros cuarenta días y cuarenta noches, estuve delante del Señor sin probar un solo bocado ni un trago de agua, porque ustedes habían pecado grandemente ante el Señor, e hicieron que se enojara grandemente.
Cuarenta días y cuarenta noches estuve postrado delante del Señor, porque iba a destruirlos.
No hay duda alguna de que lo que Dios ha revelado acerca de nuestra fe es muy grande: Cristo vino a la tierra como hombre, fue declarado inocente por el Espíritu, fue visto por los ángeles, fue predicado entre las naciones, creído en el mundo y recibido en la gloria.
Nuestro sumo sacerdote entiende nuestras debilidades, porque él mismo experimentó nuestras tentaciones, si bien es cierto que nunca cometió pecado.