Su elegido responde: «Yo revelaré los eternos propósitos de Dios, pues el Señor me ha dicho: “Tú eres mi hijo. Hoy mismo te he concebido.
Marcos 1:11 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Se escuchó entonces una voz del cielo que decía: «Tú eres mi Hijo amado; en ti me complazco». Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y vino una voz de los cielos que decía: Tú eres mi Hijo amado; en ti tengo complacencia. Biblia Nueva Traducción Viviente Y una voz dijo desde el cielo: «Tú eres mi Hijo muy amado y me das gran gozo». Biblia Católica (Latinoamericana) mientras se escuchaban estas palabras del Cielo: 'Tú eres mi Hijo, el Amado, mi Elegido. La Biblia Textual 3a Edicion Y vino una voz de los cielos: Tú eres mi Hijo amado; en ti hallo mi complacencia.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y [vino] una voz de los cielos: Tú eres mi Hijo amado; en ti me complazco. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y vino una voz del cielo que decía: Tú eres mi Hijo amado, en ti tengo contentamiento. |
Su elegido responde: «Yo revelaré los eternos propósitos de Dios, pues el Señor me ha dicho: “Tú eres mi hijo. Hoy mismo te he concebido.
Vean a mi Siervo, a quien yo sostengo, mi elegido, en quien me deleito. En él he puesto mi Espíritu, él mostrará lo que es justicia a las naciones del mundo.
«Aquí tienen a mi siervo, mi escogido, mi amado, en quien mi alma se deleita. Pondré mi Espíritu sobre él, y anunciará justicia a las naciones.
Pero mientras hablaba, una nube resplandeciente los cubrió y una voz dijo desde la nube: «Este es mi Hijo amado; en él me complazco. Obedézcanlo».
y una voz de los cielos dijo: «Este es mi Hijo amado, y en él me complazco».
En el instante en que Jesús salía del agua, vio los cielos abiertos y al Espíritu Santo que descendía sobre él en forma de paloma.
En eso, una nube los cubrió. Desde la nube resonó una voz que les dijo: «Este es mi Hijo amado. Óiganlo a él».
y el Espíritu Santo bajó sobre él en forma de paloma. Entonces se oyó una voz del cielo que decía: ―Tú eres mi Hijo amado; estoy muy contento contigo.
De la nube salió una voz que dijo: «Este es mi Hijo, al que yo escogí. Escúchenlo».
»Dios amó tanto al mundo, que dio a su único Hijo, para que todo el que cree en él no se pierda, sino tenga vida eterna.
Y el Padre mismo que me envió ha testificado en mi favor. Pero ustedes nunca han oído su voz ni han visto su figura,
pero al resucitar de entre los muertos por el poder del Espíritu Santo, probó ser el Hijo de Dios.
Él nos rescató del reino de las tinieblas y nos trasladó al reino de su Hijo amado,