Desde que Juan el Bautista comenzó a predicar hasta ahora, se ha combatido mucho contra el reino de los cielos, y los que son violentos luchan para acabar con él.
Lucas 5:1 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Un día, Jesús estaba a la orilla del lago de Genesaret y la gente lo apretujaba para oír el mensaje de Dios. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Aconteció que estando Jesús junto al lago de Genesaret, el gentío se agolpaba sobre él para oír la palabra de Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente Cierto día, mientras Jesús predicaba en la orilla del mar de Galilea, grandes multitudes se abalanzaban sobre él para escuchar la palabra de Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) Cierto día la gente se agolpaba a su alrededor para escuchar la palabra de Dios, y él estaba de pie a la orilla del lago de Genesaret. La Biblia Textual 3a Edicion Sucedió que al agolparse la multitud sobre Él para oír la palabra de Dios (Él estaba de pie junto al lago Genesaret), Biblia Serafín de Ausejo 1975 Sucedió, pues, que, mientras él estaba de pie junto al lago de Genesaret, el pueblo se fue agolpando en torno a él, para oír la palabra de Dios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y aconteció, que estando Él junto al lago de Genezaret, la multitud se agolpaba sobre Él para oír la palabra de Dios. |
Desde que Juan el Bautista comenzó a predicar hasta ahora, se ha combatido mucho contra el reino de los cielos, y los que son violentos luchan para acabar con él.
Jesús le había ordenado a sus discípulos que le tuvieran siempre lista una barca para evitar que el gentío lo oprimiera,
Una vez más una inmensa multitud se congregó en la orilla del lago donde Jesús enseñaba. Era tanto el gentío que Jesús tuvo que subirse a una barca y sentarse a hablarles desde allí.
Jesús lo acompañó. En medio de aquella multitud que se apretujaba a su alrededor, estaba una mujer que durante los últimos doce años había estado enferma con cierto tipo de derrame de sangre.
Mientras, se habían juntado miles de personas, tantas que se atropellaban unas a otras. Jesús comenzó a hablar y les dijo primero a sus discípulos: «Cuídense de la levadura de los fariseos, o sea, de su hipocresía.
Entonces vio dos barcas que estaban en la playa. Los pescadores las habían dejado allí mientras lavaban sus redes.
Un día, Jesús subió a una barca con sus discípulos y les dijo: ―Vamos al otro lado del lago. Y partieron.
Mientras navegaban, él se quedó dormido. Entonces se desató una tormenta sobre el lago, y la barca comenzó a hundirse poniéndolos a ellos en peligro.
Cuando los demonios salieron del hombre, entraron en los cerdos. Y todos los cerdos corrieron hacia el lago por el despeñadero y se ahogaron.
Jesús preguntó: ―¿Quién me tocó? Como todos negaban haberlo tocado, Pedro le dijo: ―Maestro, es mucha la gente que te aprieta y empuja.
Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los dos que habían seguido a Jesús después de oír a Juan.
Después de esto, Jesús se fue al otro lado del mar de Galilea o de Tiberíades.
También recibieron el Arabá, con el Jordán como límite al occidente, desde Quinéret hasta el pie del monte Pisgá y el Mar Salado (llamado también mar del Arabá).
Acuérdense de quienes los han guiado y les han anunciado el mensaje de Dios. Piensen en cuál fue el resultado de vivir como vivieron, e imiten su fe.
Sijón controlaba también el valle del río Jordán en el norte hasta las costas del lago de Galilea y al sur hasta el Mar Salado y las faldas del monte Pisgá.