»Durante el gobierno de estos reyes, el Dios del cielo establecerá un reino que jamás será destruido, al que nadie jamás podrá conquistar. Este reino de Dios destruirá a todos estos reinos, pero él mismo permanecerá estable para siempre.
Lucas 10:9 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Sanen a los enfermos y díganles: “El reino de Dios ya está cerca de ustedes”. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 y sanad a los enfermos que en ella haya, y decidles: Se ha acercado a vosotros el reino de Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente Sanen a los enfermos y díganles: “El reino de Dios ahora está cerca de ustedes”. Biblia Católica (Latinoamericana) sanen a los enfermos y digan a su gente: El Reino de Dios ha venido a ustedes. La Biblia Textual 3a Edicion y sanad a los enfermos que haya° en ella y decidles: El reino de Dios se ha acercado a vosotros. Biblia Serafín de Ausejo 1975 curad los enfermos que haya en ella, y decidles: 'Está cerca de vosotros el reino de Dios'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y sanad a los enfermos que en ella haya, y decidles: El reino de Dios se ha acercado a vosotros. |
»Durante el gobierno de estos reyes, el Dios del cielo establecerá un reino que jamás será destruido, al que nadie jamás podrá conquistar. Este reino de Dios destruirá a todos estos reinos, pero él mismo permanecerá estable para siempre.
Este era su mensaje: «Arrepiéntanse de sus pecados porque el reino de los cielos se ha acercado».
Y desde aquel mismo instante Jesús comenzó a predicar: «Arrepiéntanse de sus pecados porque el reino de los cielos se ha acercado».
Un día les dijo: «¿Cómo les describiré el reino de Dios? ¿Con qué podemos compararlo?
Echaron fuera muchos demonios y sanaron a muchos enfermos ungiéndolos con aceite.
Pero cuando lleguen a un pueblo y no los reciban bien, salgan a las plazas y digan:
“Hasta el polvo de este pueblo, que se nos ha pegado a los pies, lo sacudimos en protesta contra ustedes. Pero les aseguro que el reino de Dios ya está cerca”.
Jesús le dijo: ―Te aseguro que si una persona no nace de nuevo no podrá ver el reino de Dios.
Jesús respondió: ―Te aseguro que el que no nace de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.
»Quiero que sepan que esta salvación de Dios se ha enviado a los que no son judíos, y ellos sí escucharán».
Sin temor alguno y sin que nadie se lo impidiera, anunciaba el reino de Dios y enseñaba acerca del Señor Jesucristo.