»Cualquiera que toque sus cuerpos muertos quedará impuro hasta la noche,
Levítico 16:28 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Después la persona encargada de quemarlos lavará su ropa y se bañará antes de regresar al campamento. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 El que los quemare lavará sus vestidos, lavará también su cuerpo con agua, y después podrá entrar en el campamento. Biblia Nueva Traducción Viviente El hombre que los queme deberá lavar su ropa y bañarse con agua antes de regresar al campamento. Biblia Católica (Latinoamericana) El que los queme deberá lavar sus vestidos y bañarse; entonces volverá al campamento. La Biblia Textual 3a Edicion Quien los queme lavará sus vestidos y bañará su cuerpo en el agua, tras lo cual podrá entrar en el campamento. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El encargado de quemarlos lavará luego sus vestidos y se bañará. Después podrá entrar en el campamento. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el que los quemare, lavará sus vestiduras, lavará también su carne con agua, y después entrará en el campamento. |
»Cualquiera que toque sus cuerpos muertos quedará impuro hasta la noche,
y deberá lavarse la ropa de inmediato. Además, se aislará hasta la noche por estar ritualmente impuro.
Además, cualquier persona que coma esa carne o saque el animal tendrá que lavarse la ropa y quedará impura hasta el anochecer.
y cualquiera que toque su cama quedará ritualmente impuro hasta el anochecer, y tendrá que lavar su ropa y bañarse.
»En cuanto al hombre que lleve el macho cabrío al desierto, lavará su ropa, se bañará y luego regresará al campamento.
El que junta las cenizas de la ternera deberá lavarse las ropas y quedará impuro hasta la noche. Esta es una ley permanente para beneficio del pueblo de Israel y para los extranjeros que viven en medio de ustedes.
»Luego deberá lavar sus vestiduras y bañarse. Después de hecho esto, regresará al campamento y permanecerá ceremonialmente impuro hasta la noche.
De igual manera, el que la quemó lavará su ropa y se bañará, y quedará impuro hasta la noche.
Esto lo harás rociando sobre ellos el agua de la purificación, y haciendo que se afeiten el cuerpo y se bañen y se laven la ropa.
Jesús le contestó: ―El que está recién bañado no necesita lavarse más que los pies, pues está completamente limpio. Y ustedes están limpios, aunque no todos.