Después Dios dijo: «Que las aguas se llenen de peces y de otros animales acuáticos, y que también haya aves que vuelen sobre la tierra, en el inmenso firmamento».
Levítico 11:10 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Los demás animales que hay en el agua no los comerán. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Pero todos los que no tienen aletas ni escamas en el mar y en los ríos, así de todo lo que se mueve como de toda cosa viviente que está en las aguas, los tendréis en abominación. Biblia Nueva Traducción Viviente Sin embargo, nunca comas ningún animal del mar o de los ríos que no tenga aletas y escamas. Son detestables para ti. Esto incluye tanto a las criaturas pequeñas que viven en aguas poco profundas como a todas las criaturas que viven en aguas profundas. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero ustedes tendrán asco a los bichos y los animales que viven en el mar o en los ríos, y que no tienen aletas ni escamas. La Biblia Textual 3a Edicion Pero todo lo que hay en los mares y en los ríos que no tenga aletas ni escamas, sea reptil o cualquier animal acuático, os serán abominación.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero de entre todo lo que pulula en el agua, y de entre todo animal viviente que hay en el agua, todo lo que no tiene aletas ni escamas, en mares y en ríos, será abominable para vosotros. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas todas las cosas que no tienen aletas ni escamas en el mar y en los ríos, así de todo reptil de agua como de toda cosa viviente que está en las aguas, las tendréis en abominación. |
Después Dios dijo: «Que las aguas se llenen de peces y de otros animales acuáticos, y que también haya aves que vuelen sobre la tierra, en el inmenso firmamento».
El que anda con sabios, será sabio; al que anda con necios, lo lastimarán.
Los justos detestan a los malvados, y los malvados detestan a los justos.
Les prohíbo estrictamente que los coman, o que toquen sus cuerpos muertos.
»En cuanto a los animales que viven en el mar o en los ríos, comerán los que tienen aletas y escamas.
»No comerás ningún animal que yo haya declarado ceremonialmente inmundo.
Pero los cobardes, los incrédulos, los corruptos, los asesinos, los que cometen inmoralidades sexuales, los que practican la brujería, los que adoran ídolos y los mentirosos, serán arrojados al lago que arde con fuego y azufre, que es la segunda muerte».