Jueces 8:18 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Luego les preguntó al rey Zeba y al rey Zalmuna: ―¿Cómo eran los hombres que ustedes mataron en Tabor? Ellos respondieron: ―Estaban vestidos como ustedes, como hijos de reyes. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Luego dijo a Zeba y a Zalmuna: ¿Qué aspecto tenían aquellos hombres que matasteis en Tabor? Y ellos respondieron: Como tú, así eran ellos; cada uno parecía hijo de rey. Biblia Nueva Traducción Viviente Después les preguntó a Zeba y a Zalmuna: —Los hombres que ustedes mataron en Tabor, ¿cómo eran? —Se parecían a ti —le contestaron—, todos tenían el aspecto de un hijo de rey. Biblia Católica (Latinoamericana) Luego dijo a Zebaj y Salmuna: '¿Cómo eran esos hombres a los que ustedes mataron en el Tabor?' Respondieron: 'Se parecían a ti, cada uno tenía el aspecto de un hijo de rey'. La Biblia Textual 3a Edicion Luego preguntó a Zeba y a Zalmuna: ¿Cómo° eran los hombres que matasteis en Tabor? Y ellos respondieron: Como tú, así eran ellos, cada uno con apariencia de hijos del rey. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dijo luego a Zébaj y a Salmuná: '¿Cómo eran los hombres que habéis matado en el Tabor?'. Respondieron: 'Parecidos a ti; todos ellos tenían aspecto de ser hijos de rey'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Luego dijo a Zeba y a Zalmuna: ¿Qué aspecto tenían aquellos hombres que matasteis en Tabor? Y ellos respondieron: Como tú, así eran ellos ni más ni menos, cada uno parecía hijo de rey. |
Se mienten unos a otros, hablando con labios aduladores; ya no hay sinceridad.
Tú creaste el norte y el sur. Los montes Tabor y Hermón cantan alegres a tu nombre.
Estas personas son murmuradoras, nunca están satisfechas con nada; siguen siempre sus deseos egoístas y son tan arrogantes que cuando hablan bien de alguien es para sacarle algún beneficio.
Cuando el general Sísara supo que Barac estaba acampado en el monte Tabor,
Un día citó a Barac, hijo de Abinoán, que vivía en Cedes, en la tierra de Neftalí y le dijo: ―El Señor Dios de Israel te manda que movilices diez mil hombres de las tribus de Neftalí y Zabulón.
También fue a Peniel, derribó la torre de la ciudad y mató a toda la población masculina.
―¡Deben de haber sido mis hermanos! —exclamó Gedeón—. Juro que si ustedes no los hubieran matado, yo tampoco los mataría a ustedes.
Pidió alimento a los hombres de Sucot. ―Estamos cansados y tenemos que seguir persiguiendo a Zeba y Zalmuna, reyes de Madián.