Siempre has librado de todo daño su persona, su hogar y sus bienes. Has hecho prosperar cuanto hace. ¡Mira cómo se ha enriquecido! ¡Razón tiene para adorarte!
Jueces 7:14 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 El otro soldado contestó: ―Tu sueño sólo puede significar una cosa: Gedeón, el hijo de Joás, el israelita, va a venir y masacrará a todas las fuerzas aliadas de Madián. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y su compañero respondió y dijo: Esto no es otra cosa sino la espada de Gedeón hijo de Joás, varón de Israel. Dios ha entregado en sus manos a los madianitas con todo el campamento. Biblia Nueva Traducción Viviente Su compañero le respondió: —Tu sueño solo puede significar una cosa: ¡Dios le ha dado a Gedeón, hijo de Joás, el israelita, la victoria sobre Madián y todos sus aliados! Biblia Católica (Latinoamericana) Su compañero le respondió: 'Eso no puede ser otra cosa que la espada de Gedeón, hijo de Joás, el israelita. Ciertamente Dios puso todo el campamento de Madián en sus manos'. La Biblia Textual 3a Edicion Y su compañero respondió, y dijo: Esto no es otra cosa sino la espada de Gedeón ben Joás, varón de Israel. Ha-’Elohim ha entregado en su mano a Madián y a todo el campamento. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Respondió su compañero: 'Esto no es otra cosa que la espada de Gedeón, hijo de Yoás, el israelita; Dios ha entregado en sus manos a Madián y todo el campamento'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y su compañero respondió, y dijo: Esto no es otra cosa sino la espada de Gedeón hijo de Joás, varón de Israel: Dios ha entregado en sus manos a los madianitas con todo el campamento. |
Siempre has librado de todo daño su persona, su hogar y sus bienes. Has hecho prosperar cuanto hace. ¡Mira cómo se ha enriquecido! ¡Razón tiene para adorarte!
Balán replicó: ―He venido, pero no tengo poder para decir nada, salvo lo que el Señor me diga. Y eso es lo que haré.
He recibido orden de bendecirlos, porque Dios los ha bendecido, y esto no puede ser cambiado.
«El Señor nos dará toda la tierra —dijeron—, porque el pueblo está muerto de miedo a causa de nosotros».
y les dijo: ―Sé perfectamente que su Dios les va a entregar mi país, y todos temblamos de miedo, especialmente nuestros gobernantes. Nos aterrorizamos con sólo oír la palabra Israel.
Cuando las naciones que estaban al oeste del río Jordán (los cananeos y los amorreos que vivían a lo largo de la costa del Mediterráneo) oyeron que el Señor había secado el río Jordán para que el pueblo de Israel pudiera cruzarlo, se les disipó completamente el valor y quedaron paralizados de temor.
«Síganme —les dijo—, porque el Señor ha puesto en nuestras manos a los moabitas». Los guerreros le siguieron y tomaron posesión de los vados del Jordán junto a Moab, y no dejaban a nadie cruzarlo.
Gedeón se arrastró hasta una de las tiendas, justo en el momento en que el hombre que dormía adentro había despertado de una pesadilla y se la contaba a su compañero de tienda. ―Tuve un sueño extraño —le estaba diciendo—. Había un gran pan de cebada que vino rodando contra nuestro campamento. Golpeó sobre nuestra tienda y la derribó.
Cuando Gedeón escuchó el sueño y su interpretación, se puso en pie allí mismo para adorar al Señor. Luego regresó junto a sus hombres y gritó: ―Levántense, que el Señor va a usarnos para vencer a los madianitas.
Entonces le gritaron a Jonatán y a su escudero: ―Vengan acá pues queremos decirles algo. ―Ven, sígueme —dijo Jonatán a su escudero—, porque el Señor nos ayudará a derrotarlos.