y dijo: ―Mi señor, le ruego por favor que no pase de largo, sino que se quede aquí un momento.
Jueces 6:18 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Pero, espera hasta que yo vaya a buscar un presente para ti. ―Bien —respondió el ángel—, me quedaré aquí hasta tu regreso. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Te ruego que no te vayas de aquí hasta que vuelva a ti, y saque mi ofrenda y la ponga delante de ti. Y él respondió: Yo esperaré hasta que vuelvas. Biblia Nueva Traducción Viviente No te vayas hasta que te traiga mi ofrenda. Él respondió: —Aquí me quedaré hasta que regreses. Biblia Católica (Latinoamericana) No te alejes de aquí hasta que vuelva con una ofrenda que depositaré ante ti'. Yavé respondió: 'Me quedaré aquí hasta que vuelvas'. La Biblia Textual 3a Edicion No te muevas de aquí, te ruego, hasta que vuelva a ti y saque mi ofrenda, y la ponga ante tu presencia. Y Él dijo: Yo me quedaré hasta que vuelvas. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Te ruego que no te alejes de aquí hasta que yo vuelva a ti, te presente mi ofrenda y la ponga delante de ti'. Y Él le respondió: 'Me quedaré hasta que vuelvas'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Te ruego que no te vayas de aquí, hasta que a ti vuelva, y saque mi presente, y lo ponga delante de ti. Y Él respondió: Yo esperaré hasta que vuelvas. |
y dijo: ―Mi señor, le ruego por favor que no pase de largo, sino que se quede aquí un momento.
Y ya que han pasado por la carpa de este servidor de ustedes, les voy a traer algo de comer, para que repongan sus fuerzas y puedan continuar su viaje. ―Muy bien —dijeron ellos—, aceptamos tu invitación.
Pero Lot insistió tanto, que ellos le aceptaron la invitación y se fueron con él a la casa. Allí él les sirvió una buena cena con pan sin levadura, recién horneado.
―Si es cierto que vas a ayudarme de esa manera —dijo Gedeón—, haz una señal para probarlo; pruébame que es realmente el Señor quien me está hablando.
Gedeón entró apresuradamente en la casa, asó un cabrito y preparó pan sin levadura, con veinticuatro kilos de harina. Luego tomó la carne en un canasto y el caldo en una olla, y lo llevó al ángel que estaba bajo la encina y se lo entregó.