»Tú les diste a comer pan del cielo cuando tuvieron hambre, y agua de la roca cuando tuvieron sed. Tú les ordenaste que entraran y conquistaran la tierra que habías prometido darles.
Juan 6:31 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Nuestros antepasados comieron el maná en el desierto, como dice la Escritura: “Les dio a comer pan del cielo”. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como está escrito: Pan del cielo les dio a comer. Biblia Nueva Traducción Viviente Después de todo, ¡nuestros antepasados comieron maná mientras andaban por el desierto! Las Escrituras dicen: “Moisés les dio de comer pan del cielo”. Biblia Católica (Latinoamericana) Nuestros antepasados comieron el maná en el desierto, según dice la Escritura: Se les dio a comer pan del cielo. La Biblia Textual 3a Edicion Nuestros padres comieron el maná en el desierto,° como está escrito: Pan del cielo les dio a comer.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Nuestros padres comieron el maná en el desierto, conforme está escrito: Pan del cielo les dio a comer '. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como está escrito: Pan del cielo les dio a comer. |
»Tú les diste a comer pan del cielo cuando tuvieron hambre, y agua de la roca cuando tuvieron sed. Tú les ordenaste que entraran y conquistaran la tierra que habías prometido darles.
»Enviaste tu generoso espíritu para que les enseñara, y no dejaste de darles pan del cielo o agua para la sed.
Pidieron carne y les mandó codornices, y les dio maná: pan del cielo.
Los israelitas comieron del maná durante cuarenta años, hasta que entraron en la tierra de Canaán, donde pudieron comer de lo que la tierra producía.
Jesús les respondió: ―Les aseguro que no fue Moisés el que les dio a ustedes el pan del cielo. Mi Padre es el que da el verdadero pan del cielo.
Los antepasados de ustedes comieron el maná en el desierto, y aun así murieron.
Yo soy el pan que bajó del cielo. Los antepasados de ustedes comieron maná y, sin embargo, murieron; pero el que come de este pan vivirá para siempre.
Sí, el Señor te humilló dejándote pasar hambre y luego te dio a comer maná, alimento que no conocían tú ni tus antepasados. Él lo hizo para que comprendieras que no sólo de pan vive el ser humano, sino de la Palabra de Dios.
Al otro día ya no hubo maná y jamás volvieron a verlo. Desde entonces comenzaron a vivir de lo que producía la tierra de Canaán.
El que tenga oídos, escuche lo que el Espíritu dice a las iglesias: El que salga vencedor comerá del maná escondido, y le daré una piedra blanca en la que habré grabado un nuevo nombre que sólo conoce el que lo recibe.