Te voy a convertir en una nación muy grande; te voy a bendecir, y te haré un hombre muy famoso. ¡Serás de bendición para muchas personas!
Josué 2:18 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 si no dejas esta cuerda colgando en la ventana y si tus parientes, tu padre, tu madre, tus hermanos o cualquier otro no están dentro de la casa. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 He aquí, cuando nosotros entremos en la tierra, tú atarás este cordón de grana a la ventana por la cual nos descolgaste; y reunirás en tu casa a tu padre y a tu madre, a tus hermanos y a toda la familia de tu padre. Biblia Nueva Traducción Viviente cuando entremos en esta tierra, tú deberás dejar esta cuerda de color escarlata colgada de la ventana por donde nos hiciste bajar; y todos los miembros de tu familia —tu padre, tu madre, tus hermanos y todos tus parientes— deberán estar aquí, dentro de la casa. Biblia Católica (Latinoamericana) Cuando entremos en este territorio, amarrarás este cordón de hilo rojo a la ventana por donde nos hiciste bajar. Reunirás junto a ti en tu casa a tu padre, tu madre, tus hermanos y a toda la familia de tu padre. La Biblia Textual 3a Edicion a menos que cuando entremos en el país, tú ates este cordón de hilo escarlata a la ventana por donde nos vas a descolgar. Reunirás entonces a tu padre y a tu madre, a tus hermanos y a toda la casa de tu padre contigo en tu casa, Biblia Serafín de Ausejo 1975 de esta forma: cuando entremos en el país, atarás este cordón de hilo escarlata a la ventana por donde nos has descolgado, y reunirás contigo en casa a tu padre, a tu madre, a tus hermanos y a toda la familia de tu padre. Biblia Reina Valera Gómez (2023) He aquí, cuando nosotros entremos en la tierra, tú atarás este cordón de grana a la ventana por la cual nos descolgaste; y tú juntarás en tu casa a tu padre y a tu madre, a tus hermanos y a toda la familia de tu padre. |
Te voy a convertir en una nación muy grande; te voy a bendecir, y te haré un hombre muy famoso. ¡Serás de bendición para muchas personas!
Después el Señor le dijo a Noé: «Entra en el barco con toda tu familia, porque tú eres el único hombre bueno que vive en este tiempo.
¿Cómo podría yo quedarme tranquila viendo que la desgracia cae sobre mi pueblo? ¿Cómo podría quedarme quieta viendo la destrucción de mi gente?
La sangre que ustedes colocarán en los postes y en las puertas será prueba de que me han obedecido; y cuando vea la sangre, pasaré de largo y no destruiré a los primogénitos de ustedes, cuando castigue a Egipto.
Como cinta escarlata son tus labios, y ¡qué bellas tus palabras! Tus mejillas, tras el velo parecen dos mitades de granadas.
pedirá que le traigan dos avecillas vivas y puras, madera de cedro, una cinta roja y una rama de hisopo.
Eleazar entonces tomará madera de cedro, ramas de hisopo e hilo escarlata y los arrojará en la fogata.
Extenderán un paño escarlata sobre todo eso, y por último lo taparán todo con una piel de cabra. Después meterán las varas en los anillos de la mesa, para el transporte.
Jesús le dijo: ―Hoy, la salvación ha llegado a esta casa, pues este hombre también es uno de los hijos de Abraham.
Tras intercambiar algunas palabras, fueron a donde los demás estaban reunidos.
En seguida te mandé a buscar, e hiciste bien en venir pronto. Aquí estamos delante del Señor, ansiosos de escuchar lo que él te ha ordenado que nos digas.
El ángel le aseguró que yo le diría cómo él y su familia podrían alcanzar la salvación.
Que el Señor sea misericordioso con Onesíforo y toda su familia, porque muchas veces me confortó y nunca se avergonzó de que yo estuviera preso.
Moisés, después de anunciar a todo el pueblo los mandamientos de la ley, tomó lana roja y ramas de hisopo, las mojó con la sangre de los becerros y los chivos mezclada con agua, y con eso roció el libro de la ley y a todo el pueblo.
―Acepto las condiciones —contestó ella, y dejó la cuerda escarlata colgando de la ventana cuando ellos se fueron.
Los jóvenes la encontraron y la sacaron, juntamente con su padre, su madre, sus hermanos, posesiones y todos los parientes que estaban con ella, y los instalaron fuera del campamento de Israel.
De esta manera Josué salvó a Rajab la prostituta y a los familiares que estaban con ella en su casa. Todavía viven entre los israelitas porque ella escondió a los espías que Josué envió a Jericó.