Cuando el justo prospera, la ciudad entera se alegra; cuando el malvado muere, la ciudad grita de alegría.
Jeremías 51:48 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 El cielo y la tierra se alegrarán cuando del norte vengan ejércitos destructores contra Babilonia, dice el Señor. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Los cielos y la tierra y todo lo que está en ellos cantarán de gozo sobre Babilonia; porque del norte vendrán contra ella destruidores, dice Jehová. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces los cielos y la tierra se alegrarán, porque del norte los ejércitos destructores vendrán contra Babilonia —dice el Señor—. Biblia Católica (Latinoamericana) Entonces el cielo y la tierra y todo lo que hay en ellos, aplaudirán contra Babilonia, cuando del norte vengan a atacarla los destructores, dice Yavé. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces los cielos y la tierra y todo lo que hay en ellos gritarán de alegría sobre Babilonia, cuando venga sobre ella desde el norte el destructor, dice YHVH. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Exultarán entonces por Babel cielo y tierra y cuanto hay en ellos, cuando vengan desde el norte los devastadores -oráculo de Yahveh-. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces el cielo y la tierra, y todo lo que en ellos hay, cantarán de gozo sobre Babilonia; porque del norte vendrán sobre ella destructores, dice Jehová. |
Cuando el justo prospera, la ciudad entera se alegra; cuando el malvado muere, la ciudad grita de alegría.
¡Canta, oh cielo, porque el Señor ha hecho esta obra admirable! ¡Clama, oh tierra, prorrumpan en canción montañas y selvas y todo árbol porque el Señor redimió a Jacob y su gloria es Israel!
¡Líbrense de su cautiverio! ¡Salgan de Babilonia, cantando en el camino! ¡Grítenle a los extremos de la tierra que el Señor ha redimido a sus siervos los israelitas!
¡Canta jubiloso, oh cielo; clama, oh tierra; prorrumpan en canciones, oh montes; porque el Señor ha consolado a su pueblo y tendrá compasión de su dolor!
pues contra Babilonia se lanzará desde el norte una nación que la arrasará de tal modo que nadie volverá a vivir en ella jamás. No quedará nada: habitantes y bestias saldrán huyendo.
¡Allá vienen! ¡Es un gran ejército que marcha desde el norte! Lo acompañan muchos reyes venidos desde diversos países.
¡Pues miren que yo levanto un ejército de naciones poderosas del norte y las lanzo al ataque contra Babilonia, la cual será destruida! ¡Las flechas enemigas dan en el blanco, no fallan!
Los ejércitos destructores enemigos llegan y matan a sus valientes; todas sus armas se les rompen a los babilonios en las manos, porque el Señor es buen pagador y le da a Babilonia su merecido.
Pero tú, cielo, regocíjate por lo que ha sucedido. Y regocíjense también los santos, los profetas y los apóstoles, porque al castigar a la gran ciudad, Dios les está haciendo justicia a ustedes».