Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Jeremías 51:29 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

Babilonia tiembla y se retuerce de dolor, porque todo lo que el Señor ha planeado contra ella se mantiene firme. Babilonia quedará desierta, sin persona viva.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Temblará la tierra, y se afligirá; porque es confirmado contra Babilonia todo el pensamiento de Jehová, para poner la tierra de Babilonia en soledad, para que no haya morador en ella.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

La tierra tiembla y se retuerce de dolor, porque todos los planes del Señor contra Babilonia no han cambiado. Babilonia quedará desolada, sin un solo habitante.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

La tierra tembló y se estremeció porque se cumplió lo que Yavé había decretado contra Babilonia: reducir el territorio de Babilonia a un desierto despoblado.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Temblará la tierra, y se afligirá, Porque todos los planes de YHVH contra Babilonia han sido confirmados, Para convertir la tierra de Babilonia en un desierto despoblado.

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Tiembla la tierra, se estremece, porque se cumplen los planes de Yahveh sobre Babel: convertir el territorio de Babel en desierto sin un solo habitante.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y temblará la tierra, y se afligirá; porque se cumplirá todo propósito de Jehová contra Babilonia, para hacer de la tierra de Babilonia una desolación, donde no haya morador.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Jeremías 51:29
25 Tagairtí Cros  

Allá todos te mirarán con asombro y preguntarán: «¿Será este aquel que hacía temblar la tierra y los reinos del mundo?


El mundo se tambalea como lo hace un ebrio, se agita como una tienda en la tormenta. Cae para no levantarse más, porque inmensos son los pecados de la tierra.


¡Pero el Señor es el único Dios verdadero, el Dios que está vivo y da vida, el Rey siempre poderoso! ¡Es tan poderoso que toda la tierra tiembla cuando él se enoja, el mundo prefiere esconderse cuando sabe que está enojado!


Por la cólera del Señor Babilonia se convertirá en un paraje desierto, y cuantos por allí pasen se quedarán con la boca abierta y harán burla de todas sus heridas.


¡Todos sus prudentes consejeros resultarán necios! ¡Habrá pánico entre todos sus más valientes guerreros!


Cuando recibió el mensaje, el rey de Babilonia dejó impotente caer los brazos; el terror le produjo dolores como de mujer a punto de dar a luz.


Oigan el plan del Señor contra Babilonia, tierra de los caldeos. Porque hasta los niñitos serán llevados como esclavos, y sus posesiones serán saqueadas y destruidas. ¡Qué espanto! ¡Qué horror!


¡El mundo entero se estremecerá por la caída de Babilonia, y su grito desesperado se oirá por toda la tierra!


Para siempre quedarás desolada; ni siquiera tus piedras se volverán a usar como material de construcción. Serás borrada del mapa.


¡Lancen contra ella los ejércitos de los reyes medos y sus generales, y los ejércitos de todos los países que ellos gobiernan! ¡Movilicen a toda la gente en contra de Babilonia!


y Babilonia se convertirá en un montón de ruinas, refugio de chacales, espantoso e increíble espectáculo, motivo de burla y vergüenza, sin persona viva.


Sus ciudades están en ruinas; es tierra desierta donde nadie habita, por donde ni siquiera pasan los viajeros.


Se escucha gran escándalo de guerra viniendo del norte. Todo el mundo se llena de espanto al acercarse el terrible ejército, pues viene el enemigo y a su paso acaba con todo cuanto halla, ciudades y gente por igual.


¡La tierra tiembla delante de ellos, y el cielo se estremece! ¡El sol y la luna se oscurecen, y se esconden las estrellas!


¡Hasta la tierra se estremecerá de horror al ver las consecuencias de mi castigo, y sus habitantes llorarán de dolor! La tierra subirá como lo hace el río Nilo en el tiempo de la inundación, se agitará y bajará de nuevo.


y con voz potente gritó: «¡Ya cayó, ya cayó la gran Babilonia! Babilonia se ha convertido en guarida de demonios, en antro de espíritus inmundos y en nido de toda ave impura y odiosa,