Jeremías 51:10 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Así es como el Señor nos hizo justicia. ¡Vamos, proclamemos en Jerusalén todo lo que ha hecho el Señor Dios nuestro! Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Jehová sacó a luz nuestras justicias; venid, y contemos en Sion la obra de Jehová nuestro Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente El Señor nos ha hecho justicia. Vengan, anunciemos en Jerusalén todo lo que hizo el Señor nuestro Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé ha hecho brillar nuestros derechos. Vengan y contemos en Sión las obras de Yavé, nuestro Dios. La Biblia Textual 3a Edicion YHVH acercó nuestra victoria: ¡Venid, anunciemos en Sión las proezas de YHVH nuestro Dios! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yahveh mostró nuestros derechos: venid y contemos en Sión la obra de Yahveh, nuestro Dios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Jehová sacó a luz nuestras justicias; venid, y contemos en Sión la obra de Jehová nuestro Dios. |
Tu inocencia alumbrará como el alba, y tu justicia resplandecerá como el sol de mediodía.
Entonces todos sentirán temor, proclamarán las poderosas obras de Dios; por fin reconocerán las admirables cosas que él hace.
Vengan y escuchen todos los que temen a Dios, y yo les contaré lo que él hizo en favor mío.
Sálvame, para que pueda alabarte públicamente en presencia del pueblo en las puertas de Jerusalén, y pueda regocijarme porque me has rescatado.
Pero todos los que queden gritarán y cantarán de gozo: los del occidente alabarán la majestad de Dios
Hablen tiernamente a Jerusalén y díganle que han terminado sus días de dolor y amargura. Sus pecados han sido perdonados, y el Señor le dará el doble de bendiciones comparado con el castigo que ha recibido.
Llegará el día cuando todos los redimidos de Dios regresarán a su patria. Volverán a Jerusalén con cánticos y llenos de gozo y de alegría sin fin; y el dolor y el luto habrán acabado para siempre.
Pero mi pueblo será librado; escaparán para regresar a su patria y contar cómo el Señor Dios suyo se lanzó furioso contra quienes destruyeron su templo.
Oigan el plan del Señor contra Babilonia, tierra de los caldeos. Porque hasta los niñitos serán llevados como esclavos, y sus posesiones serán saqueadas y destruidas. ¡Qué espanto! ¡Qué horror!