Llegó a edificar un santuario en el monte que está frente a Jerusalén, para Quemós, el depravado dios de Moab, y otro para Moloc, el ídolo abominable de los amonitas.
Jeremías 48:46 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 ¡Ay de ti, Moab! El pueblo del dios Quemós ha sido destruido, y a sus hijos e hijas se los llevan como esclavos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 ¡Ay de ti, Moab! pereció el pueblo de Quemos; porque tus hijos fueron puestos presos para cautividad, y tus hijas para cautiverio. Biblia Nueva Traducción Viviente »¡Qué aflicción te espera, oh pueblo de Moab! ¡El pueblo del dios Quemos queda destruido! Tus hijos y tus hijas fueron llevados cautivos. Biblia Católica (Latinoamericana) ¡Ay de ti, Moab!
¡Estás perdido, pueblo de Camos!
Pues tus hijos han sido llevados al destierro
y tus hijas al cautiverio. La Biblia Textual 3a Edicion ¡Ay de ti, Moab! ¡Pereció el pueblo de Quemos! Tus hijos marchan en cautiverio, Y tus hijas parten para el destierro. Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¡Ay de ti, Moab! ¡Estás perdido, pueblo de Camós! Tus hijos son llevados cautivos, tus hijas van al destierro. Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¡Ay de ti, Moab! pereció el pueblo de Quemos: porque tus hijos serán llevados cautivos, y tus hijas cautivas. |
Llegó a edificar un santuario en el monte que está frente a Jerusalén, para Quemós, el depravado dios de Moab, y otro para Moloc, el ídolo abominable de los amonitas.
Luego hizo quitar los santuarios de las colinas que estaban al oriente de Jerusalén, al sur del Monte de la Destrucción (Salomón había edificado estos altares a Astarté, la detestable diosa de los sidonios, a Quemós el horrible dios de Moab, y a Moloc, el detestable dios de los amonitas).
Las mujeres de Moab son dejadas en los bajos del río Arnón, como aves sin nido.
Entonces por fin Moab será avergonzado debido a su ídolo Quemós, tal y como lo fue Israel por su idolátrico becerro en Betel.
Porque confiaron en su riqueza y sus habilidades, por lo tanto morirán. Su dios Quemós, junto con sus sacerdotes y príncipes, será llevado a tierras lejanas.
¡Ay de ti, Moab! Pueblo de Quemós, ¡estás acabado! Los hijos de Moab han huido, y sus hijas han sido capturadas por Sijón, rey de los amorreos.
Conserva para ti todo lo que tu dios Quemós te dé, y nosotros retendremos todo lo que el Señor nuestro Dios nos dé.