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Jeremías 33:25 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

Pero esta es la respuesta del Señor: ¡Yo no rechazaría a mi pueblo así como no modificaría mis leyes del día y la noche, de la tierra y el cielo! ¡Jamás abandonaré a los israelitas, ni a mi servidor David; no modificaré el plan de que un descendiente suyo gobierne un día sobre estos descendientes de Abraham, Isaac y Jacob! Por el contrario, les restauraré su prosperidad y tendré piedad de ellos, voy a liberarlos del cautiverio y traerlos de regreso a su tierra.

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Biblia Reina Valera 1960

Así ha dicho Jehová: Si no permanece mi pacto con el día y la noche, si yo no he puesto las leyes del cielo y la tierra,

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Sin embargo, esto dice el Señor: así como no cambiaría las leyes que gobiernan el día y la noche, la tierra y el cielo, así tampoco rechazaré a mi pueblo.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Mas Yavé sostiene: Si no es cierto que yo hice el día y la noche, ni establecí leyes para el cielo y la tierra,

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La Biblia Textual 3a Edicion

Así dice YHVH: Como es cierto que he creado el día y la noche, y he establecido los cielos y la tierra,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Pues así dice Yahveh: tan cierto como es que existe mi pacto con el día y con la noche, y que he establecido las leyes del cielo y de la tierra,

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Así dice Jehová: Si no permaneciere mi pacto con el día y con la noche, si yo no he puesto las leyes del cielo y de la tierra,

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Jeremías 33:25
9 Tagairtí Cros  

Dios puso estas luces en el cielo para que alumbraran la tierra de día y de noche, y para que separaran la luz de la oscuridad. Y Dios vio que esto era hermoso.


Mientras exista la tierra, habrá siembra y cosecha; siempre habrá frío y calor, verano e invierno, los días y las noches».


Él destinó la luna para marcar los meses, y el sol para marcar los días.


Tus leyes siguen siendo verdaderas hoy, porque todo está de acuerdo a tus planes.


Él los estableció para siempre. Sus órdenes no serán revocadas jamás.


Cuando puedan quebrantar mi pacto con el día y la noche, de modo que el día no venga cuando le corresponda, sólo entonces será quebrantado mi convenio con mi siervo David, de modo que no haya hijo suyo que reine en su trono. Y mi convenio con los sacerdotes y levitas ministros míos, no se deroga.