Rodeado de carros que se cuentan por millares; el Señor viene del monte Sinaí para entrar en su santo templo.
Hechos 7:53 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Sí, ustedes que quebrantan la ley que recibieron de mano de los ángeles». Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 vosotros que recibisteis la ley por disposición de ángeles, y no la guardasteis. Biblia Nueva Traducción Viviente Deliberadamente desobedecieron la ley de Dios, a pesar de que la recibieron de manos de ángeles. Biblia Católica (Latinoamericana) ustedes, que recibieron la Ley por medio de ángeles, pero que no la han cumplido. La Biblia Textual 3a Edicion Vosotros,° que recibisteis la ley por medio de los ángeles, y no la guardasteis. Biblia Serafín de Ausejo 1975 vosotros que recibisteis la ley por ministerio de los ángeles, y no la habéis observado'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) que recibisteis la ley por disposición de ángeles, y no la guardasteis. |
Rodeado de carros que se cuentan por millares; el Señor viene del monte Sinaí para entrar en su santo templo.
¿No es cierto que Moisés les dio a ustedes la ley? Sin embargo, ninguno de ustedes la obedece. ¿Por qué quieren matarme?
En el desierto, Moisés estuvo como mediador entre el pueblo de Israel y el ángel que en la cumbre del Sinaí le entregó las palabras de vida para comunicárselas a nuestros antepasados.
Pero entonces, ¿para qué se nos dio la ley? Después que Dios le dio la promesa a Abraham, Dios añadió la ley a causa de nuestros pecados, pero sólo hasta que viniera la descendencia de Abraham, a la que se la había hecho la promesa. Además, Dios encomendó a los ángeles entregar la ley a Moisés, que fue el intermediario.
Lo curioso es que ni siquiera los que están circuncidados guardan la ley, pero quieren que ustedes se circunciden para luego jactarse de que ustedes hicieron lo que ellos querían.
«El Señor vino a nosotros en el monte Sinaí, apareció desde el monte Seír; resplandeció desde el monte Parán, rodeado por diez millares de ángeles, y con fuego flameante en su mano derecha.
Si el mensaje que los ángeles anunciaron fue verdadero y toda desobediencia recibió su merecido castigo,