Y en esta carta le decías a Sofonías: “El Señor te ha nombrado para reemplazar a Joyadá como sacerdote en Jerusalén. Y en tu responsabilidad está arrestar a cualquier loco que diga ser profeta, y ponerlo en el cepo.
Hechos 26:25 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Pablo contestó: ―No estoy loco, excelentísimo Festo. Lo que digo es cierto y no es ninguna locura. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Mas él dijo: No estoy loco, excelentísimo Festo, sino que hablo palabras de verdad y de cordura. Biblia Nueva Traducción Viviente Pero Pablo respondió: —No estoy loco, excelentísimo Festo. Lo que digo es la pura verdad, Biblia Católica (Latinoamericana) No estoy loco, excelentísimo Festo, contestó Pablo; estoy diciendo cosas verdaderas con mucho sentido. La Biblia Textual 3a Edicion Pablo responde:° No estoy loco, excelentísimo Festo, sino que pronuncio palabras de verdad y de cordura. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y Pablo: 'No estoy loco -dijo-, ilustre Festo; por el contrario, estoy pronunciando palabras verdaderas y sensatas. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero él dijo: No estoy loco, excelentísimo Festo, sino que hablo palabras de verdad y de cordura. |
Y en esta carta le decías a Sofonías: “El Señor te ha nombrado para reemplazar a Joyadá como sacerdote en Jerusalén. Y en tu responsabilidad está arrestar a cualquier loco que diga ser profeta, y ponerlo en el cepo.
Además, distinguido Teófilo, yo mismo investigué con mucho cuidado los acontecimientos desde su origen, y ahora te los describo en orden,
Jesús les respondió: ―No tengo ningún demonio. Lo único que hago es honrar a mi Padre. Ustedes en cambio, me deshonran a mí.
Esto lo reconocemos con gratitud, en todas partes y en todo momento, excelentísimo Félix.
Su fe en las verdades que hemos enseñado debe ser firme, para que pueda enseñarlas y convencer a los que la contradicen,
Más bien, honren en su corazón a Cristo como Señor. Estén siempre listos para responder a todo el que les pida explicaciones sobre la esperanza que ustedes tienen.
No le hagan mal al que les hizo mal ni insulten al que los insultó. Al contrario, bendíganlo, porque Dios los eligió a ustedes para que reciban bendición.