José de Arimatea, miembro distinguido del Consejo Superior de los judíos, y quien también esperaba el reino de Dios, se llenó de valor y se presentó ante Pilato para pedirle el cuerpo de Jesús.
Hechos 17:12 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 En consecuencia, un buen grupo creyó, junto con varias griegas prominentes y muchos hombres. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Así que creyeron muchos de ellos, y mujeres griegas de distinción, y no pocos hombres. Biblia Nueva Traducción Viviente Como resultado, muchos judíos creyeron, como también lo hicieron muchos griegos prominentes, tanto hombres como mujeres. Biblia Católica (Latinoamericana) Un buen número de ellos abrazó la fe y, de entre los griegos, algunas mujeres distinguidas y también bastantes hombres. La Biblia Textual 3a Edicion Por tanto, muchos de ellos creyeron, así como algunas prominentes mujeres griegas, y no pocos varones. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Muchos, pues, de entre ellos abrazaron la fe y, entre los griegos, mujeres distinguidas y no pocos hombres. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Así que creyeron muchos de ellos; y mujeres griegas distinguidas, y no pocos hombres. |
José de Arimatea, miembro distinguido del Consejo Superior de los judíos, y quien también esperaba el reino de Dios, se llenó de valor y se presentó ante Pilato para pedirle el cuerpo de Jesús.
Si alguien se decide a hacer la voluntad de Dios, reconocerá si mis enseñanzas provienen de Dios o si yo hablo por mi propia cuenta.
Entonces Pablo y Bernabé valientemente les dijeron: «Era necesario que las buenas noticias de Dios las conocieran primero ustedes los judíos. Pero como las rechazan y se muestran indignos de la vida eterna, no nos queda otro remedio que ofrecérselas a los gentiles.
Pero un día, los judíos instigaron a mujeres piadosas y distinguidas, y a los jefes de la comunidad, y persiguieron a Pablo y Bernabé y los expulsaron de la localidad.
Pablo y Bernabé fueron a la sinagoga judía en Iconio y predicaron de tal modo que un gran número de gentiles y judíos creyeron.
y alababan a Dios. Todo el mundo simpatizaba con ellos y todos los días el Señor añadía a la comunidad a los que habían de ser salvos.
Fíjense, hermanos, en los que Dios ha llamado entre ustedes: pocos son sabios, poderosos o nobles, según los criterios humanos.
y el rico, de su humilde condición. El rico se marchitará como la flor del campo.
Por eso, despójense de toda suciedad y de la maldad que tanto abunda. De esa manera podrán recibir con humildad la palabra sembrada en ustedes. Esta palabra tiene poder para salvarles la vida.