La falta de consejo frustra los planes; la abundancia de consejo los prospera.
Hechos 15:6 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 En vista de esto, los apóstoles y los ancianos convocaron una reunión para tratar el asunto. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y se reunieron los apóstoles y los ancianos para conocer de este asunto. Biblia Nueva Traducción Viviente Así que los apóstoles y los ancianos se reunieron para resolver este asunto. Biblia Católica (Latinoamericana) Entonces los apóstoles y los presbíteros se reunieron para tratar este asunto. La Biblia Textual 3a Edicion Y se reunieron los apóstoles y los ancianos para considerar este asunto. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Reuniéronse, pues, los apóstoles y los ancianos para examinar este asunto. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y se reunieron los apóstoles y los ancianos para considerar este asunto. |
La falta de consejo frustra los planes; la abundancia de consejo los prospera.
porque dondequiera que estén dos o tres reunidos en mi nombre, allí estaré yo».
Y luego encomendaron a Bernabé y a Saulo la tarea de llevar las ofrendas a los ancianos.
Como Pablo y Bernabé discutieron con ellos y se les opusieron con todas sus fuerzas, los creyentes los enviaron a Jerusalén, acompañados de varios creyentes, para que consultaran el asunto con los apóstoles y los ancianos.
Entonces los apóstoles, los ancianos y la congregación en pleno decidieron nombrar a personas que fueran con Pablo y Bernabé a Antioquía a dar a conocer la decisión. Escogieron a Judas (conocido también como Barsabás) y a Silas. Ambos tenían buen testimonio entre los hermanos.
Nos ha parecido bien y hemos acordado unánimemente, que dos de nuestros hombres, Judas y Silas, acompañen a nuestros queridos hermanos Pablo y Bernabé
Al llegar a Jerusalén, fueron muy bien recibidos por la iglesia, los apóstoles y los ancianos. Pablo y Bernabé los pusieron al tanto de lo que Dios había hecho por medio de ellos.
Y de ciudad en ciudad fueron comunicando la decisión que habían tomado los apóstoles y los ancianos en Jerusalén.
Al segundo día, Pablo nos llevó consigo a visitar a Jacobo y a los ancianos que estaban reunidos con él.
Para solucionar el problema, los doce convocaron a todos los creyentes a una reunión, y les dijeron: ―Nosotros debemos dedicarnos a predicar y no a administrar el programa de alimentación.
Obedezcan a sus líderes y sométanse a ellos, porque los cuidan a ustedes como quienes tienen que rendir cuentas. Obedézcanlos para que ellos cumplan su trabajo con alegría y sin quejarse, pues el quejarse no les trae ningún provecho.
Acuérdense de quienes los han guiado y les han anunciado el mensaje de Dios. Piensen en cuál fue el resultado de vivir como vivieron, e imiten su fe.