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Hechos 13:9 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

Entonces Saulo (que también se llama Pablo), lleno del Espíritu Santo, clavó los ojos en el mago y le dijo:

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Biblia Reina Valera 1960

Entonces Saulo, que también es Pablo, lleno del Espíritu Santo, fijando en él los ojos,

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Saulo, también conocido como Pablo, fue lleno del Espíritu Santo y miró al hechicero a los ojos.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Entonces Saulo, que no es otro que Pablo, lleno del Espíritu Santo, fijó en él sus ojos

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La Biblia Textual 3a Edicion

Entonces Saulo (que también es Pablo), lleno del Espíritu Santo, fijando los ojos en él,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Pero Saulo -también llamado Pablo- lleno de Espíritu Santo, fijando sus ojos en él,

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Entonces Saulo, que también es Pablo, lleno del Espíritu Santo, fijando sus ojos en él,

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Hechos 13:9
9 Tagairtí Cros  

En cambio, yo estoy lleno de poder, de justicia y de fuerza. Estoy lleno del Espíritu del Señor para denunciar sin temor todas las maldades y la desobediencia de Israel.


No serán ustedes los que hablen: ¡el Espíritu de su Padre hablará a través de ustedes!


Jesús, mirándolos con una mezcla de enojo y tristeza por la indiferencia que mostraban, le dijo al hombre: ―Extiende la mano. Y al extenderla, se le sanó.


Jesús le colocó de nuevo las manos sobre los ojos, y el hombre miró fijamente y pudo ver todo con claridad.


Jesús los miró y les dijo: ―Entonces, si está escrito: “La piedra que los constructores despreciaron, se ha convertido en la piedra más importante”, ¿qué quiere decir eso?


Entonces cada uno de los presentes quedó lleno del Espíritu Santo y empezó a hablar en idiomas que no conocía, pero que el Espíritu Santo le permitía hablar.


Después de esta oración, el edificio donde estaban reunidos se estremeció y quedaron llenos del Espíritu Santo, y se entregaron a predicar con arrojo el mensaje de Dios.


Entonces Pedro, lleno del Espíritu Santo, les respondió: ―Distinguidos dirigentes y ancianos del pueblo:


Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, elevó los ojos al cielo y contempló la gloria de Dios y a Jesús a la derecha de Dios.