¡Que admirable, que agradable es que los hermanos vivan juntos en armonía!
Hebreos 13:1 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 No dejen de amarse unos a otros con amor de hermanos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Permanezca el amor fraternal. Biblia Nueva Traducción Viviente Sigan amándose unos a otros como hermanos. Biblia Católica (Latinoamericana) Manténgase el amor fraterno. La Biblia Textual 3a Edicion Permanezca el amor fraternal. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Que el amor fraterno permanezca. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Permanezca el amor fraternal. |
¡Que admirable, que agradable es que los hermanos vivan juntos en armonía!
Cuando llegó el día de Pentecostés, los creyentes estaban juntos reunidos.
Todos los creyentes estaban unidos enteramente en alma y corazón, ninguno tenía por suyo lo que poseía, sino que lo compartía con los demás.
Les hablo así, hermanos, porque ustedes fueron llamados a ser libres. Pero no usen esa libertad para dar rienda suelta a sus pasiones. Más bien sírvanse unos a otros con amor.
En cambio, este es el fruto que el Espíritu produce en nosotros: amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fidelidad,
Estando unidos a Cristo Jesús no cuenta nada si estamos circuncidados o no. Nos basta la fe que actúa a través del amor.
Esfuércense por mantener la unidad creada por el Espíritu, por medio de la paz que nos une.
Y vivan amando a los demás, siguiendo el ejemplo de Cristo, que nos amó y se entregó por nosotros en sacrificio, como ofrenda de perfume agradable a Dios.
Amados hermanos, debemos dar gracias a Dios por ustedes, como es justo, porque ha crecido mucho su fe y el amor mutuo sigue abundando.
Tratemos de ayudarnos unos a otros para animarnos al amor y a hacer el bien.
Ahora que ustedes se han purificado porque obedecen a la verdad y tienen un amor sincero por sus hermanos, ámense con todo su corazón unos a otros,
Traten a todos con respeto. Amen a los hermanos, honren a Dios y respeten al rey.
En fin, vivan ustedes en armonía unos con otros. Compartan sus penas y alegrías, ámense como hermanos, tengan compasión y sean humildes.
Sobre todo, ámense en gran manera unos a otros, porque el amor cubre muchos pecados.
a la devoción a Dios, el afecto fraternal; y al afecto fraternal, el amor.
Su mandamiento es que creamos en Jesucristo su Hijo y que nos amemos unos a otros, como lo mandó.
Si alguno dice: «Amo a Dios», pero aborrece a su hermano, es un mentiroso. Si no ama al hermano que tiene delante, ¿cómo puede amar a Dios, a quien jamás ha visto?