para que haya suficiente alimento durante los siete años de escasez, y así se evitará el desastre.
Génesis 47:19 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 ¿Por qué hemos de morir? Cómprenos a nosotros y a nuestras tierras, y seremos esclavos del faraón. Cómprenos a nosotros por alimentos para que vivamos y para que la tierra no quede deshabitada. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 ¿Por qué moriremos delante de tus ojos, así nosotros como nuestra tierra? Cómpranos a nosotros y a nuestra tierra por pan, y seremos nosotros y nuestra tierra siervos de Faraón; y danos semilla para que vivamos y no muramos, y no sea asolada la tierra. Biblia Nueva Traducción Viviente ¿Por qué morir delante de sus propios ojos? Cómprenos a nosotros y también a nuestras tierras a cambio de alimentos; ofrecemos nuestras tierras y nos ofrecemos nosotros mismos como esclavos para el faraón. Solamente provéanos de grano para que podamos vivir y no muramos, y para que la tierra no quede vacía y desolada». Biblia Católica (Latinoamericana) Tú no puedes vernos morir a nosotros y nuestras tierras; compranos, pues, a nosotros y nuestras tierras, a cambio de pan, y seremos nosotros y nuestras tierras propiedad de Faraón. Danos trigo para que no muramos; así viviremos y nuestra tierra no quedará desolada. La Biblia Textual 3a Edicion ¿Por qué hemos de morir ante tus ojos, tanto nosotros como nuestra tierra? Cómpranos a nosotros y a nuestra tierra por pan, y nosotros y nuestro suelo seremos esclavos de Faraón, pero danos semilla para que podamos vivir y no muramos, y la tierra no sea asolada. Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¿Vamos a morir ante tus ojos, nosotros y nuestras tierras? Cómpranos, pues, a nosotros y a nuestras tierras a cambio de pan; y seremos nosotros con nuestras tierras esclavos del Faraón. Pero danos con qué sembrar, para que vivamos y no muramos, y nuestras tierras no se conviertan en un desierto'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¿Por qué moriremos delante de tus ojos, así nosotros como nuestra tierra? Cómpranos a nosotros y a nuestra tierra por pan, y seremos nosotros y nuestra tierra siervos de Faraón; y danos semilla para que vivamos y no muramos, y no sea asolada la tierra. |
para que haya suficiente alimento durante los siete años de escasez, y así se evitará el desastre.
Cuando a la gente se le terminó el dinero, fueron a José a suplicar que se les diera alimentos. ―Se nos ha terminado el dinero —dijeron—. Por favor, denos alimentos, porque si no moriremos de hambre.
Al año siguiente vino nuevamente el pueblo y le dijo: ―Señor, usted sabe que ya no tenemos dinero. Además, todo nuestro ganado ahora es suyo. Tan solo podemos pagarle con nuestros cuerpos y nuestras tierras.
Entonces José compró toda la tierra de Egipto para el faraón. La verdad es que, debido al hambre, los egipcios vendieron sus tierras. De ese modo, todo el país pasó a poder del faraón.
―¿Y qué si lo perjudico en carne propia? —respondió el acusador—. El hombre dará cualquier cosa por salvar su vida. ¡Dáñalo con una enfermedad, y te maldecirá en tu propia cara!
Su pueblo gime buscando pan; han vendido todo lo que tienen por comida para poder sobrevivir: «¡Mira, oh Señor, el lamentable estado en que me encuentro!».
Nos sometimos a los egipcios y a los asirios para tener al menos algo que comer.
¿De qué les sirve ganarse el mundo entero y perder la vida eterna? ¿Habrá algún valor terrenal que compense la pérdida del alma?